Rajoy ha respondido así en la sesión de control al Gobierno en el Congreso a una pregunta del portavoz del PSOE, Antonio Hernando, sobre si trasladó a Trump en su conversación telefónica de la semana pasada alguna preocupación por sus primeras decisiones.
"Sé, me consta y estoy absolutamente convencido de que si ustedes estuvieran en el Gobierno en lugar de estarlo yo, hubieran hecho exactamente lo mismo", ha afirmado el jefe del Ejecutivo, que ha añadido que, por eso, no le preocupan "para nada" las críticas socialistas "de cara al futuro".
Ha reiterado que España y Estados Unidos son socios estratégicos, amigos y aliados que comparten valores, intereses, relaciones comerciales e inversiones.
Y ha recalcado que quiere mantener con Trump "exactamente las mismas relaciones" que ha tenido con su antecesor, Barack Obama.
Según Rajoy, siempre habrá cuestiones en las que discrepar, pero en las relaciones internacionales conviene incidir más en lo que se está de acuerdo, una máxima que ha dicho que practica con el presidente de Estados Unidos y "con el resto de la totalidad de presidentes de Gobierno y jefes de Estado.
No obstante, ha asegurado que cuando algo perjudique a los intereses de los españoles, así lo trasmitirá y defenderá porque esa es su primera obligación como jefe del Ejecutivo.
La segunda, ha añadido, es llevarse bien con los países, sobre todo, con los que son amigos y aliados.
"Indudablemente España debe mantener las mejores relaciones", ha afirmado el portavoz socialista, pero ha recalcado que "cuando las amenazas de la campaña de Trump se convierten en realidades, un aliado debe defender con firmeza su posición e, incluso, mostrar su desacuerdo".
Ha subrayado que así lo han hecho la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande, y "nadie duda de la solidez de las relaciones de esos Estados con EEUU".
En su opinión, "hay muchos motivos para estar preocupados", especialmente, la afección a los derechos humanos con las primeras medidas adoptadas por la administración Trump.
Rajoy debería estar también preocupado, ha señalado, por la relación que el presidente estadounidense pretende mantener con México y otros países iberoamericanos, así como por cómo van a afectar a España sus medidas de desregulación.
Para Hernando, el jefe del Ejecutivo debería haber aprovechado la conversación para ser "el portavoz de todas estas preocupaciones, de la comunidad iberoamericana y de la Unión Europea y, no, para ponerse al servicio de Trump y ser su emisario", ha subrayado.
"Jamás una presunta razón de Estado debe ser la excusa para no defender derechos humanos como usted ha hecho", le ha criticado.
Tampoco, ha añadido, para justificar políticas que desestabilicen el orden internacional, aunque "esas políticas vengan de la mano de un populismo del hombre más poderoso del mundo, porque nunca ser más fuerte significa tener más razón".
"Por eso, hoy queremos decirle que ni nos identificamos ni estamos orgulloso de su actuación de representación de España ante el presidente Trump; más bien, nos avergüenza", ha concluido.