El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha instado a los independentistas catalanes a que dejen de inventarse "conspiraciones" del Estado contra ellos y ha subrayado que la única operación que él ha dirigido ha sido la destinada a superar la crisis.
Rajoy ha rechazado de esta forma la existencia de una supuesta 'operación Cataluña', por la que le ha preguntado ante el pleno de la Cámara Alta la senadora de ERC Mirella Cortés.
Cortés le había pedido en la sesión de control del Senado que explicara si está informado de esa operación, que ha precisado que consiste en utilizar el aparato del Estado y sus fondos reservados para desacreditar ilegítimamente a los políticos independentistas.
En concreto, le había preguntado si negaba que lo que se ha organizado es "un nuevo GAL sin violencia física pero que ha mantenido las malas artes, las cloacas del Estado, los dosieres falsos, los periodistas comprados y las recompensas con fondos reservados" y si él era "el señor X que dirige la operación".
"El argumento de la conspiración -le ha contestado Rajoy- es muy cómodo porque ahorra la molestia de pensar, exculpa al que emplea el argumento de toda responsabilidad, se la endosa al mejor amigo del hombre, que es el chivo expiatorio, y arrincona la conveniente sensatez para moverse en los asuntos públicos".
Si inventarse operaciones no cree que sea el camino más adecuado, ha señalado que ya ha escuchado también hablar a ERC de la "operación zanahoria", consistente en que, si él quiere plantear algo al presidente de la Generalitat, Esquerra no lo va a apoyar porque considera que es un mero señuelo.
Frente a los argumentos de Cortés, ha insistido en que la operación de la que él está informado, porque le ha ocupado muchas horas, ha sido la dirigida a superar la mayor crisis económica que ha tenido España en décadas. Una actuación que ha dicho que fue muy positiva para Cataluña, como cree que lo fueron también los 63.000 millones de euros del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) y del pago a proveedores. "Esto sí que fue una gran operación porque permitió mantener los servicios públicos, que los proveedores cobraran, que no cerraran las empresas y se atendieran los vencimientos de deuda", ha añadido.
Rajoy ha aprovechado para subrayar que también se ha dedicado a coincidir con muchos ciudadanos que quieren seguir siendo catalanes, españoles y europeos. Ha dicho coincidir, asimismo, con quienes quieren que la ley se cumpla, que los gobernantes no se la salten "a la torera", que las instituciones no sean de una ideología, sino que defiendan al conjunto de los ciudadanos y que no se divida "inútilmente" a la sociedad.
Del mismo modo, ha defendido que los gobiernos tengan "un mínimo de personalidad y no haya fuerzas extrasistema", en referencia a la CUP, que nombren presidentes de la Generalitat o impongan determinadas condiciones que deriven en un cambio del modelo económico y social de Cataluña. De todo eso ha dicho que él está dispuesto a dialogar, pero no para incumplir juntos la ley.
La senadora Cortés había enumerado actuaciones que considera que demuestran esa "operación Cataluña", entre ellas que el exministro del Interior Jorge Fernández "conspirara" en su despacho con el director de la Oficina Antifraude, Daniel de Alfonso, o los mensajes del director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, Jorge Moragas, a Victoria Álvarez, exnovia de Jordi Pujol Ferusola.