Las pymes catalanas no plantean las pretensiones soberanistas en Cataluña

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha recibido en el Palacio de la Moncloa al presidente de Pimec, Josep González, representante de la patronal de pymes catalanas, que es favorable a la consulta independentista.

Fue después de su reelección al frente de la patronal catalana, a mediados de junio, cuando González solicitó encontrarse con Rajoy.

Sin embargo, Mariano Rajoy, y la patronal de las pymes catalanas (PIMEC) han evitado hablar de la consulta que pretende el presidente de la Generalitat, Artur Mas, y no han hecho la más mínima referencia a ese proceso durante la reunión de dos horas.

Así lo ha asegurado al término de esa reunión Josep González, quien ha defendido que no se hablará "ni en broma" de las pretensiones soberanistas en Cataluña debido a que su patronal representa a 110.000 empresarios con opiniones muy distintas sobre ese proceso.

Esa pluralidad es la que le ha llevado a no plantear el asunto a Rajoy, quien ha asegurado que tampoco ha habido el más mínimo comentario al respecto por parte del presidente del Gobierno. "Les puedo jurar que no hemos hablado de la consulta. Aunque sea sorprendente ha sido así", ha reconocido González.

El representante de las pymes catalanas, ha continuado diciendo que "Nosotros a lo nuestro. Los que tienen que votar son los empresarios".

En esa línea, ha insistido: "Más allá de lo que quiere decir un derecho a decidir no queremos saber nada, no entramos".

Por su parte, sí ha defendido que el Gobierno central y el de la Generalitat busquen "puentes de diálogo imaginativos porque la gente debe entenderse".

A su juicio, aunque se han aprobado iniciativas que han permitido mejorar la situación, aún faltan muchas más para facilitar la financiación de las pymes y la afluencia de crédito, cuestión en la que ha explicado que Rajoy les ha dicho que tampoco está satisfecho.

Finalmente, ha elogiado reformas como la laboral y la iniciativa del pago a proveedores, y ha considerado que en la reforma fiscal se ha desaprovechado la ocasión de dar más pasos en favor de las pymes.