El jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, y el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, han defendido el pacto sobre la UE por entender que reforzará la posición de España en el próximo Consejo Europeo y han explorado la posibilidad de llegar a un acuerdo en temas como la reforma de las administraciones. En esta cuarta cita en Moncloa en lo que va de legislatura, que se ha prolongado cerca de dos horas y media, ambos han querido escenificar el consenso europeo alcanzado la semana pasada por PP y PSOE.
Los dos han comparecido en rueda de prensa posterior, por separado, para avalar las bondades del acuerdo. Tanto uno como otro han considerado que la unidad hace la fuerza, han dicho que con su alianza "gana España" y han confiado en que se puedan sumar otros grupos parlamentarios.
Rubalcaba ha defendido la oportunidad del acuerdo europeo y ha argumentado que trata de unir fuerzas para que España gane en el Consejo Europeo de la próxima semana. "¿Se juega el PSOE algo (con este pacto)?", se ha preguntado Rubalcaba, quien se ha respondido inmediatamente a sí mismo: "Quien se juega es España y los españoles". Esa postura es la suya, la de todo el PSOE y la de Eduardo Madina, ha aclarado Rubalcaba en relación a las voces que atribuyen al secretario general del grupo socialista en el Congreso el liderazgo de una corriente interna dentro de su partido crítica con ese acuerdo, algo que ha desmentido el propio disputado vasco.
"Nadie me ha cuestionado la oportunidad del acuerdo", ha zanjado Rubalcaba, y ha sostenido que cuenta con "la simpatía, la confianza y el apoyo de la inmensa mayoría de los socialistas españoles" en este pacto.
Otro de los temas a los que han dedicado "un rato" de su conversación privada ha sido a la reforma de las administraciones públicas, asunto que aprueba este viernes el Consejo de Ministros y sobre el que Rubalcaba ha dicho estar abierto a negociar. Así, ha ofrecido un "diálogo franco" a Rajoy, aunque le ha pedido que cuente para esa modificación con las autonomías.
Después, Rajoy se ha mostrado seguro de que será posible el entendimiento con las comunidades, que ya han demostrado su "lealtad" con la ley de estabilidad presupuestaria. "Si se es leal, se pueden hacer grandes cosas por el país", ha insistido, y aunque ha dicho que hablará con los presidentes autonómicos, ha precisado que no tiene previsto aún convocar una Conferencia de Presidentes.
Rubalcaba también ha hablado de las recomendaciones del FMI y ha sido para mostrar su absoluto desacuerdo con las mismas, por considerar que hay "un problema de enfoque" que ya condujo el año pasado a la reforma laboral aprobada por el Gobierno de Rajoy. Según su diagnóstico, el enfoque no es cómo despedir más barato a los trabajadores, sino cómo contratar. "Hay que preocuparse de que todos entren en el mercado de trabajo, no de cómo se sale", ha apostillado.
Durante la reunión no han hablado de pensiones, aunque en la rueda de prensa posterior Rajoy ha destacado la necesidad de tomar medidas para garantizar la sostenibilidad del sistema. Rubalcaba, por su parte, ha opinado que es un "error" embarcarse en otra reforma porque la última lleva seis meses en vigor, y ha recordado además que aquella fue pactada con los agentes sociales, por lo que espera que la nueva cuente con el mismo consenso.