Casa Real

La relación entre el Rey emérito y Felipe VI: del orgullo a la fractura familiar

El Rey emérito se ha reencontrado con su hijo Felipe VI dos años después de que Don Juan Carlos se viera forzado a marcharse de España.

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El Rey Juan Carlos I ha llegado este lunes al Palacio de la Zarzuela para reencontrarse con su hijo, Felipe VI, con la reina Sofía y otros miembros de la familia en un encuentro privado. El Rey emérito ha pasado un largo fin de semana en Sanxenxo, Pontevedra, donde ha participado en el Trofeo Viajes InterRías.

Don Juan Carlos, con americana y corbata, ha llegado a bordo de un vehículo gris sentado en el asiento del copiloto, escoltado por otro coche de seguridad. La Casa Real no ha informado sobre quiénes van a participar en el encuentro, catalogado como "un encuentro familiar en el ámbito privado", que no está incluido en la agenda de actividades oficiales de Felipe VI, por lo que los medios no van a poder acceder a la Zarzuela. Por ahora, no está previsto que la Casa del Rey vaya a distribuir fotografías de la cita, aunque sí lo ha hecho en algunos casos parecidos, como fue en las celebraciones que hubo en 2018 cuando don Juan Carlos y doña Sofía cumplieron 80 años.

El último encuentro entre padre e hijo se produjo el 28 de enero de 2020, cuando ambos se reencontraron en el funeral de Pilar de Borbón, la hermana del Rey emérito. Acudieron también la reina Letizia y doña Sofía.

La relación entre el padre y el hijo se ha ido tensando en los últimos meses. En su discurso de proclamación, Don Felipe prometió ejemplaridad. "Una Monarquía renovada para un tiempo nuevo", fueron sus palabras. Poco a poco fue tomando distancia del reinado de su padre, aunque marzo de 2020 fue el punto de inflexión.

Ese mes saltó a la luz que una cuenta de Don Juan Carlos en el extranjero estaba siendo investigada. Meses más tarde, Don Felipe renunció a la herencia de su padre, y le retiró, además, su asignación de casi 200.000 euros anuales.

Sin embargo, las informaciones sobre el Rey emérito continuaron y se vio obligado a marcharse de España. En marzo de 2022, la Fiscalía del Tribunal Supremo acordó archivar la investigación sobre sus bienes. El emérito comunicó entonces su decisión de volver de forma esporádica a España.

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