El Rey Juan Carlos ha subrayado este lunes su compromiso con España a lo largo de toda su vida, y ha destacado que este compromiso permanece vivo en su corazón "junto con la intensa satisfacción del deber cumplido".
El anterior jefe de Estado se ha expresado así en un acto académico celebrado este lunes en la Real Academia de la Historia con motivo de su 80 cumpleaños, un acto al que ha acudido acompañado por la Reina Sofía. "Al cumplir los ochenta años, vuelvo la vista atrás y advierto que en mi vida, desde mi infancia, he tenido siempre delante de mis ojos un nombre: España", ha dicho Don Juan Carlos en su intervención. Y ha añadido que esa "fuerza del compromiso de la Corona con España" volvió a sentirla en el "entrañable acto" del pasado 30 de enero, cuando su hijo y heredero, Felipe VI, impuso a la Princesa de Asturias el collar de la insigne Orden del Toisón de Oro. "Un compromiso que permanece vivo en mi corazón junto a la intensa satisfacción del deber cumplido", ha remachado.
Don Juan Carlos ha intervenido tras una exposición del académico Juan Pablo Fusi sobre la transición española, y ha señalado que esa transición, "tan admirada internacionalmente, situó a España en el conjunto avanzado de los grandes países".
Eso sí, ha subrayado que aunque "fueron muchos los que contribuyeron al cambio histórico", el verdadero protagonista fue, en realidad, "el pueblo español". En sus palabras, ha recalcado que, para él, una de las funciones más gratas que la Constitución encomienda al Rey es la del Alto Patronazgo de las Reales Academias, instituciones que nacieron a partir del siglo XVIII de la mano de "ciudadanos justos y libres", con el aliento y la protección de la Corona y un lema común "muy preciso": "servir al honor de la Nación".
"Los académicos fundadores pensaban en España. No en una España encerrada en sus fronteras, sino en una España abierta al mundo en todos los órdenes: de la política, de la ciencia, del comercio", ha detallado. Y aunque ha reconocido que las Academias tuvieron en el siglo XIX "etapas de mediocridad y hasta de ruina", y fueron vistas como entidades cerradas y ajenas a la realidad social, ha destacado cómo "cuando las provincias ultramarinas se independizaron de la metrópoli, fueron las Academias las que se mantuvieron como únicos puentes de enlace".
En ese momento, ha recordado, la Academia Española "tuvo la feliz idea de promover la formación de Academias correspondientes americanas" y así el idioma "se convirtió en agente de cohesión de las nacientes repúblicas".
Don Juan Carlos ha subrayado que durante la democracia las Academias han cobrado "un nuevo vigor" y ha destacado varios proyectos, entre ellos el Diccionario biográfico Digital que ultima la Real Academia de la Historia o el Vocabulario científico y técnico, o el Diccionario de términos médicos que ahora va a hacerse panhispánico.
La labor de la RAE
También ha aludido especialmente a que la Academia Española, ha "convertido en realidad el viejo sueño" de unir a todas las Academias, de manera que todas juntas "han fijado la normativa que rige el uso de la lengua común" que usan más de 550 millones de hispanohablantes.
El Rey Juan Carlos ha aprovechado para animar a las academias a intensificar su acción aprovechando los recursos de las tecnologías digitales, para así "llegar a todos y enriquecer a todos con saber y ejemplaridad".
