El rey Felipe VI apostó en Lisboa por el refuerzo de los estrechos vínculos que unen a España con Portugal y por seguir trabajando "hombro con hombro" para afrontar los retos que ambos países tienen ante sí en el siglo XXI, tanto en el ámbito europeo como en el iberoamericano.
Cavaco Silva: "Nunca las relaciones fueron tan intensas ni tan diversificadas"
El monarca español se entrevistó con el presidente portugués, Aníbal Cavaco Silva, en el Palacio de Belem, en el primer acto de la jornada de su visita oficial de presentación a este país, en la que le acompaña la reina Letizia.
Los dos jefes de Estado comparecieron ante la prensa tras la reunión para dejar constancia del buen momento de las relaciones entre los dos países, de las que Cavaco dijo que "nunca fueron tan intensas ni tan diversificadas", y para ratificar su compromiso de seguir por el mismo camino en el futuro.
El rey Felipe aseguró que ambos países tienen intereses y problemas comunes que deben ser afrontados con una "voluntad de trabajo" conjunta y "hombro con hombro", gracias a la "relación tan especial, de buena vecindad, amistad y trabajo en común" que les une.
En el primero de los tres viajes a los países vecinos de España que emprende desde su proclamación, el monarca recordó los vínculos familiares e históricos con Portugal y aseguró que, al igual que en su anterior visita como príncipes de 2012, este nuevo viaje les llena de "emoción".
Explicó que se trata de una visita "corta y rápida" pero que refleja su voluntad de estar lo antes posible en Lisboa. "Ahí está el compromiso nuestro de hacer valer la historia que nos antecede y proyectar esa relación hacia el futuro, por el bien de españoles y portugueses", concluyó.
Por su parte, Aníbal Cavaco Silva destacó que las buenas relaciones se extienden a los campos económico, empresarial, científico, cultural y de seguridad. Además el jefe del Estado luso abogó por aprovechar los estrechos lazos bilaterales en instituciones internacionales y la Unión Europea para la "defensa de intereses comunes".
Invitación a una visita más "reposada"
En la Sala das Bicas del Palacio de Belem, ante una gran expectación de los medios de comunicación, hizo una mención especial a los reyes Juan Carlos y Sofía, padres de Felipe VI, por el "legado de excelente relación" entre España y Portugal.
Con la reina española y la esposa del presidente luso, Maria Cavaco Silva, en la misma sala, el mandatario portugués emplazó a los reyes españoles a volver a Portugal "en el futuro", en una visita más "reposada" para contactar con sus gentes y conocer otras regiones del país.
Felipe y Letizia permanecerán apenas seis horas y media en suelo luso, un viaje en el que además de ser agasajados en un almuerzo ofrecido por el jefe del Estado en el Palacio de Queluz, conocerán el Parlamento y mantendrán un encuentro personal con el primer ministro, Pedro Passos Coelho.