La portavoz de Vox en la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha denunciado durante su discurso en el pleno de investidura de Isabel Díaz Ayuso las presiones que han recibido para regalar sus votos "a cambio de nada".
"En cuanto ha habido disposición negociadora y voluntad para conseguir entendimiento, el acuerdo no se ha hecho esperar", asegura Monasterio, que explica que aunque son muchas cosas las que les separan del PP y Ciudadanos, "entre ser el baluarte de las políticas de la izquierda y permitir un Gobierno del PSOE ayudado de los comunistas y los pretendientes de chavistas, ante eso, sin lugar a dudas preferíamos facilitar la investidura de Ayuso".
Por ello, pide respeto a para sus votantes: "Nosotros no aguantamos ningún tipo de extorsión. Vengan de las filiales mediáticas de los partidos, de los cordones sanitarios que emulan las prácticas de la izquierda sectaria y tratan a nuestros votantes como apestados, vengan de chiringuitos subvencionados, vengan de donde vengan no retrocederemos ni un milímetro".
Rocío Monasterio asegura que Vox se debe a los españoles corrientes y comunes a los que "hablan de natalidad mientras desde aquí se financia el aborto con el dinero de todos los madrileños mientras tienen tiempo para inaugurar el Comisionado del Bienestar Animal".
Continúa explicando que desde Vox se deben a los españoles a los que les dicen "facha o nazi por exigir que se pueda educar a sus hijos en castellano en todo el territorio nacional" y lanza una crítica a Ciudadanos por su defensa de la gestación subrogada: "Venimos a hablar de las españolas que vemos asombradas cuando hablando de igualdad proponen que alquilen nuestros vientres. ¿Qué igualdad es esta?", se pregunta.
Respecto al acuerdo de Gobierno alcanzado con el PP y Ciudadanos, Monasterio explica que aunque estas medidas indignen al "consenso 'progre'", deben entender que no han llegado aquí para hacer guiños, sino para mejorar la vida de los madrileños.
"Nosotros lo que queremos es mejorar la economía de los madrileños, queremos bajar impuestos, pero si no reducimos el gasto político ineficaz provocamos déficit y un aumento de la deuda y esto es una gestión irresponsable. Con nuestras medidas queremos reducir la administración, que genera más obstáculos que facilidades por eso no nos parece muy oportuno pasar de 9 a 13 consejerías que vendrán acompañadas de viceconsejerías y de todo lo que viene detrás", critica. "No tienen sillones para tanto consejero y con qué dinero van a pagarlo, es todo un despropósito", añade.
"Nosotros venimos a limpiar la ciénaga. Y sí, a desmontar chiringuitos como hizo Abascal con la Agencia de Protección de Datos, que la cerró", aseguraba mientras en la bancada de los partidos de izquierda sonaba una carcajada.
Para estos partidos también ha tenido reproches Rocío Monasterio. "Algunos de ustedes se creen rebeldes, como aquellos que llevan la camiseta del sanguinario Che y que hacen la revolución desde sus móviles de única generación cuando la única revolución pendiente es la de la libertad de Venezuela y la de mi querida Cuba".
Lamentaba también que con las políticas de izquierdas, las familias no podrán garantizar a los niños las mismas oportunidades de las que se gozaban antes: "Y mientras ustedes aquí con el cambio climático, la comisión de bienestar animal y toda esa 'patulea'".
Nosotros no vamos a ceder a ningún chantaje porque por mucho nos intenten presionar, nosotros solo nos debemos a los españoles, al español corriente y común al que le hablan de natalidad mientras desde aquí se financia el aborto con el dinero de todos los madrileños.