El cabeza de lista de Junts pel Sí (JxSí) en las elecciones catalanas del 27S, Raül Romeva, ha advertido a la CUP de que ninguno de los nombres alternativos sugeridos por la izquierda anticapitalista como posibles candidatos a la Presidencia de la Generalitat tienen más apoyo que Artur Mas.
En declaraciones radiofónicas, Romeva ha salido al paso del documento de la CUP en la que se exponen cinco fórmulas para la presidencia que evitarían dar a Mas un rol preeminente en el nuevo Govern, una de las cuales sería investir a un "presidente de consenso" que "refuerce la transversalidad y la pluralidad del independentismo".
La CUP plantea que ese "presidente de consenso" sea Romeva, porque "ha aglutinado el apoyo de los partidos e independientes que conformaban su candidatura" y "podría no generar el voto contrario de otras formaciones", en alusión a Cataluña Sí que es Pot, pero el exeurodiputado de ICV ha rechazado de plano tal hipótesis.
Según Romeva, "no es verdad que haya nombres alternativos a Artur Mas que tengan más apoyo", por lo que "hay que superar esta dicotomía". "He salido yo, Oriol Junqueras, Neus Munté... Ninguno de nosotros tiene el cien por cien de apoyos, ni tan solo dentro de JxS", ha subrayado.
En su opinión, "enrocarnos con el nombre hace que perdamos de vista la complejidad del momento y la trascendencia de lo que vivimos". "Cuando tenemos una ofensiva tan brutal del Estado hemos de tener muy blindados determinados aspectos, como el institucional, para poder hacerle frente", ha argumentado Romeva, que ha admitido que, en lo que respecta a la investidura, "no hay una fórmula que sea satisfactoria" para los 62 diputados de JxSí y los 10 de la CUP.
Aun así, ha recordado que JxSí ha puesto sobre la mesa una propuesta que pasaría por un Govern presidido por Mas, con tres macroáreas controladas por Oriol Junqueras, Neus Munté y el propio Romeva, que de esta manera compartirían el timón del ejecutivo. "Es una propuesta con cuatro personas, que se investirían conjuntamente. Es factible hacerlo", ha defendido Romeva, que ha protestado porque "la respuesta aún no sabemos cuál es".
"Aún no hemos tenido la posibilidad de discutirla como tal. Pedimos poderlo hacer", ha dicho Romeva, en un emplazamiento a la CUP. En caso de no llegarse a un acuerdo, Romeva ha desdramatizado el escenario de unas elecciones anticipadas en marzo: "A estas alturas, ya no hay nada que sea una catástrofe", ha asegurado, aunque sí ha admitido que esa hipótesis "no es deseable".