El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha calificado este jueves de "detestable" la violencia desatada en las protestas que han tenido lugar este miércoles en Barcelona, y acto seguido ha añadido: "Pero el problema no es la violencia, el problema es que haya alguien que quiera relacionar al PSOE con la violencia". "Ese es el problema de quien lo quiere hacer; un problema serio", ha remachado.
Rubalcaba ha criticado la actitud del ministro de Educación, Cultura y Deportes, José Ignacio Wert, a quien ha acusado de empezar con las acusaciones contra el PSOE en "un pleno memorable en el que perdió la cartera, es decir, se quedó sin educación, en dos minutos y medio". Después de ese pleno, ha añadido Rubalcaba, comenzó el rosario de declaraciones y fotos y pies de fotos "intolerables" que el PSOE "tiene que rechazar".
Rubalcaba ha señalado que la postura del partido sobre la reforma es conocida y ratificada por todos los secretarios generales, y ha confirmado que el PSOE presentará un texto alternativo con dos elementos de referencia fundamentales: "El acuerdo que sindicatos y empresarios hicieron en materia de negociación colectiva y moderación salarial", un camino que, a su juicio, "el gobierno tenía que haber recorrido", y el programa electoral del PSOE, "con muchas propuestas dirigidas a la creación de empleo, y pensadas para las pymes y los emprendedores". "Nos parece importante reclamar una vez más al Gobierno el diálogo que ha faltado durante todo este proceso", ha subrayado.
Preocupación por los sectores de Sanidad y Educación
A renglón seguido, ha anunciado que el PSOE constituirá grupos de trabajo para seguir el desarrollo de los acontecimientos en relación a los servicios públicos esenciales de la sanidad y la educación, "cuyo deterioro preocupa muchísimo". Así, ha asegurado que "la sanidad se está deteriorando a pasos agigantados", pese a que "España gasta poco dinero en relación a otros países de Europa".
Además, ha expresado su preocupación por la posible desigualdad que podría darse entre territorios y que supondría la existencia de ciudadanos de primera y de segunda en función de las comunidades de residencia. Una situación de deterioro que ha hecho extensible a la educación, donde el empeoramiento es "evidente" y donde existen comunidades que "claramente" practican una discriminación entre las enseñanzas pública y privada.