La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Presidencia y para las Administraciones Territoriales, Soraya Sáenz de Santamaría, ha sostenido que el proceso soberanista en Cataluña ha sido "un negocio" para algunos, en referencia a los independentistas, y la "ruina" para el conjunto de esta Comunidad Autónoma.
En Málaga, donde ha participado en un acto del PP bajo el lema 'Lo que nos une, España', con el presidente de los 'populares' andaluces, Juanma Moreno; el líder del PP de Málaga, Elías Bendodo, y el alcalde de la capital, Francisco de la Torre; ha defendido la actuación del Gobierno con Mariano Rajoy al frente para "devolver el autogobierno a los catalanes y que tengan un gobierno dentro de la ley, que se preocupe por ellos y no sólo por los independentistas".
Sáenz de Santamaría ha recalcado en su intervención, ante más de 700 personas, que el Gobierno central "ha tenido que actuar" en Cataluña: "No podíamos permitir que una comunidad autónoma y unos gobernantes se situaran al margen de la ley y de las sentencias del Tribunal Constitucional; para la Generalitat la única ley que servía era la ley de la selva, la suya propia".
Ha señalado que en las elecciones del 21 de diciembre Cataluña necesita que se pueda nombrar un Ejecutivo "dentro de la ley, que se preocupe por su crecimiento económico, su bienestar, su educación y que vuelva a levantar Cataluña, su riqueza y su pluralidad".
En definitiva, un Gobierno "donde todo el mundo pueda hablar y todas las opiniones valgan lo mismo", y que la convivencia, "que es la esencia de nuestro país, pueda volver a esa tierra".
La vicepresidenta ha incidido en que el Ejecutivo de Rajoy ha tenido que cesar a los dirigentes de la Generalitat catalana "porque no cumplían las instrucciones del Gobierno ni las de los tribunales". "A quien no cumple la ley se le tiene que aplicar la ley", ha apostillado.
También ha indicado que han hecho que las finanzas y la seguridad públicas, "sufragadas con dinero de todos, estén al servicio de la ley y no de la independencia". Además, ha agregado: "estamos desmontando las estructuras de autogobierno a redactores de la construcción nacional y a los embajadores de la independencia que vivían a todo trapo en las sedes de las mejores calles de la Unión Europea porque mal, a costa del erario público, no vivían ninguno".
"El independentismo solo sabe traer pobreza"
En su intervención, Sáenz de Santamaría ha recordado el año 2012 y el Gobierno de Artur Mas, destacando que cuando había que sacar a Cataluña de la crisis económica, "pudo hacerlo dos años porque le apoyó el PP; no nos gustaba pero había que hacerlo".
Sin embargo, "empezaron a insultarle por la calle y decidió envolverse en su bandera y echarle la culpa de los males de Cataluña al conjunto de los españoles: fue injusto, cruel y falso". "España es un país solidario, nos ayudamos todos, y cuando no hay dinero para financiar los servicios públicos en la Junta de Andalucía o en la Generalitat por un problema de gestión siempre ha estado en primera línea el Gobierno de España y el conjunto de los españoles con su esfuerzo y sus impuestos", ha defendido.
En su opinión, el independentismo "sólo sabe traer pobreza, división, y ha llevado los problemas de las instituciones a las calles y las casas". Para la vicepresidenta, "prometieron la tierra prometida y no le reconocen en ningún lugar de la tierra".
Cataluña, ha recalcado, "la hemos construido entre todos y es motor del conjunto de España", por ello, ha considerado que la opción política que "puede devolver a esa tierra la estabilidad, las empresas y el crecimiento es el PP en Cataluña".
A partir de las elecciones del 21 de diciembre, "hay que volver a construir la Cataluña moderna, plural, profundamente española construida con mucho esfuerzo también por el andaluz, extremeño, castellano".
Esa comunidad autónoma, ha continuado Sáenz de Santamaría, "a la que nos sentíamos orgullosos de ir y la que nos sentimos orgullosos de volver a construir con ayuda de todos".