Sonia Castedo sobre los regalos que recibió siendo alcaldesa de Alicante: "A día de hoy es un delito pero hace unos cuantos años era normal"

Un tribunal ha archivado definitivamente la investigación por supuesta corrupción en torno al denominado Plan Rabasa, en el que figuraban como investigados la exalcaldesa de Alicante Sonia Castedo y el constructor Enrique Ortiz, entre otros, al no apreciar indicios de delito.

Esta era una de las dos piezas del caso Brugal que implicaban a Castedo, quien sigue investigada en la rama relativa a las supuestas irregularidades en el diseño del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), al igual que su antecesor en la alcaldía, el popular Luis Díaz Alperi, y el propio Ortiz, entre otros.

La exalcaldesa de Alicante asegura en Espejo Público que tras ocho años "escuchando muchas cosas" y "lo que la gente que hay a tu alrededor ha tenido que sufrir" es más doloroso y considera que esta sentencia "llega tarde" pero confía en que "poco a poco todo se vaya archivando" porque subraya que "tengo, por desgracia, a mi espalda otra mochila que es el caso Brugal".

Sobre el caso Brugal asegura no saber qué va a suceder pero espera que ocurra igual que con el caso Rabasa y cree que "la justicia tiene sus tiempos y al final me toca seguir esperando".

Preguntada sobre a qué se dedica mientras espera la resolución del juez, Castedo cuenta que aunque "me ha costado mucho" ahora trabaja en la empresa privada, pero asegura que "tu nombre acaba convirtiéndose en una lacra" y aunque "mucha gente quiera contratarte" no se atreven.

En relación con las escuchas telefónicas con Enrique Ortiz, Castedo diferencia entre cuestiones privadas y políticas y matiza que se trataban de "conversaciones privadas". Castedo cofiesa que "siento vergüenza de las conversaciones con Enrique Ortiz" aunque matiza que "ninguna de esas conversaciones contienen ningún tipo de delito" aunque "éticamente son incorrectas".

Preguntada sobre las acciones que realizó mientras era alcaldesa, en relación con unas vacaciones que supuestamente pagó el empresario Ortiz, los regalos que aceptó o sobre la visita de los Reyes Magos a su casa, Castedo asegura que "a día de hoy es un delito pero hace unos cuantos años era normal" y añade que "estaba normalizado" e incluso el Ayuntamiento realizaba regalos y matiza que el problema es que "ahora intentamos criminalizar lo que hace unos años era absolutamente normal" y matiza que lo lógico hubiera sido llegar a un término medio.

Castedo explica que desde "el primer momento" reconoció que conocía a Enrique Ortiz pero asegura que nunca le ha beneficiado y que "se puede demostrar que yo nunca he beneficiado al empresario Ortiz".

La exalcaldesa de Alicante reconoce que se fue a Ibiza en el barco de Enrique Ortiz y asegura que no ha sido la única que lo ha hecho porque "era muy normal" en aquellos tiempos y ella "no consideraba que estuviera cometiendo ningún tipo de delito".

Preguntada sobre si desde el Partido Popular le han llamado para pedir disculpas por haberla despreciado mientras estuvo imputada, Castedo asegura que a nivel privado desde el PP de Alicante ha recibido el apoyo de algunos compañeros, pero señala que a nivel público no lo han hecho, al igual que a nivel nacional.