Fernández Díaz ha reconocido hoy que quizá se ha podido cometer algún "exceso" en la actuación de la Policía con los estudiantes del instituto Lluis Vives. "Descargar toda la responsabilidad en que la actuación de la Policía ha sido excesiva es políticamente cobarde y moralmente miserable", ha criticado el SUP.
El sindicato mayoritario en la Policía Nacional considera además que si se han producido una mala actuación policial, lo primero que debe hacer el ministro del Interior es cesar a la máxima responsable política, la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Paula Sánchez de León. El SUP también ha sido muy crítico con el jefe superior de Policía de Valencia, Antonio Moreno, cuyas declaraciones refiriéndose a los manifestantes como el "enemigo", en un lenguaje "claramente del pasado", han venido a arrojar "más gasolina al fuego". "Su gestión de la crisis, junto con la delegada del Gobierno ha sido un fracaso", denuncia el SUP.
Para el sindicato, los estudiantes no tienen derecho a cortar el tráfico, pero tampoco los responsables policiales pueden pretender solucionar este problema "matando moscas a cañonazos". A su juicio, durante los incidentes de ayer el número de efectivos policiales fue "claramente insuficiente" porque si en lugar de 50 agentes, hubieran acudido 300, se podría haber formado un cordón y restablecer la circulación "sin dar un solo golpe". "Mala planificación, sin medios, decisiones erróneas y peor explicación. Y no puede haber cuatro periodistas golpeados porque van a informar, no a manifestarse", critica.