El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha dado por zanjada su polémica con la 'número dos' del PSM, Maru Menéndez, a la que acusó de haber filtrado una reunión interna, pero ha evitado pedirle disculpas públicas como exigían el PSM y su secretario general, Tomás Gómez.
"He hablado con Maru Menéndez y el asunto está zanjado", ha dicho Rubalcaba preguntado en rueda de prensa junto al secretario general del PSOE asturiano, Javier Fernández. El líder socialista ha evitado incluso confirmar que le haya pedido excusas a Menéndez en privado.
Rubalcaba no ha respondido a si cree que hay filtradores en sus órganos de dirección ni si se propone mantener una especie de ley del silencio en las reuniones internas del partido durante todo su mandato.
El problema con Menéndez, 'número dos' de Tomás Gómez y persona de su absoluta confianza, saltó el martes por la mañana, cuando Rubalcaba le dijo a Eduardo Madina, que pensaba que ella era la 'filtradora' de una reunión interna, y que tendría que echarla. Era una conversación privada pero la captó una cámara que tomaba imágenes de la reunión del Grupo Parlamentario Socialista.
Esta mañana, el secretario general del PSOE madrileño defendía la fidelidad de su cilaboradora: "Cualquier persona que conozca a Maru Menéndez sabe que en la vida ha contado absolutamente nada que haya ocurrido en un órgano interno del PSOE. Que nunca ha ocurrido una filtración, que nunca lo va a hacer. Es una persona integra de principios valores y una persona leal".
