La ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya, ha informado de que el Gobierno turco ha decidido quedarse con un cargamento de respiradores que habían sido adquiridos por administraciones públicas españolas porque lo considera una "prioridad" para tratar los casos de coronavirus que están surgiendo en el país. Los respiradores habían sido adquiridos por Castilla-La Mancha y Navarra en Turquía.
Aprovechando una escala
En rueda de prensa junto al ministro de Sanidad, Salvador Illa, en el Palacio de la Moncloa, González Laya ha reconocido que en los últimos días el Gobierno turco "ha estado poniendo restricciones a las exportaciones de productos sanitarios de amplio espectro, principalmente motivado por su preocupación de poder abastecer su propio sistema sanitario", motivo por el cual tanto ella misma como Illa han estado haciendo gestiones que les han llevado a hablar en varias ocasiones con sus homólogos turcos. La ministra se ha referido a un lote de respiradores que habían adquirido administraciones públicas españolas y sobre los cuales el Ejecutivo ha preguntado esta semana a las autoridades turcas, si bien la respuesta ha sido que "por ahora no van a salir de Turquía". "El resultado de las discusiones que hemos tenido es que hasta aquí hemos podido llegar", ha explicado. En Turquía solo estaba haciendo escala el cargamento.
Según González Laya, lo que ha "garantizado" el Gobierno turco a España es que "en un plazo prudencial, en unas semanas", el cargamento de respiradores se volverá a poner a disposición de nuestro país, aunque no ha especificado ninguna fecha aproximada. A pesar de ello, la jefa de la diplomacia española ha remarcado que esta semana tanto el ministro de Sanidad como ella misma, en tres ocasiones, han estado en contacto con las autoridades turcas y que "fruto de ese esfuerzo" se ha materializado la llegada de otro cargamento que incluye mascarillas, equipos de protección individual y gafas.
Los controles chinos
En cuanto a las adquisiciones de material procedente de China, la ministra ha explicado que el Gobierno de aquel país ha introducido nuevas medidas de control de todo lo que exporta, lo cual es, a su juicio, "una buena noticia porque va a dar un plus suplementario a la calidad" de los productos que lleguen. Según ha destacado, las autoridades chinas han "consultado y dialogado" con España acerca de todas estas medidas con el objetivo de que se establezcan los "canales adecuados para que el suministro comprado" en aquel país "siga fluyendo regularmente" a través de los corredores aéreos puestos en marcha y llegue en las "condiciones óptimas". Durante estos días pasados se ha polemizado sobre la calidad de algunas importaciones y si estaban o no homologadas por una u otra administración.