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PUIGDEMONT NO CONVOCA ELECCIONES
Cientos de personas pasan del enfado con Puigdemont a la euforia en las calles al ver la DUI más cerca
La calle ha sido reflejo de la confusión que ha generado entre los suyos el president Puigdemont. Por la mañana, ante las sospechas de que convocaría elecciones, se le tachaba de "traidor". Por la tarde, los insultos se han convertido en aplausos.
En paralelo a todos los movimientos en los despachos, las bases del independentismo se movían por las calles de Barcelona. Estaban convocados para protestar contra el 155. Pero cambiaron el temario para protestar contra la presunta intención de Carles Puigdemont de convocar elecciones.
La calle ha sido reflejo de la confusión que Puigdemont ha generado entre los suyos ante la posibilidad de convocar elecciones. Las protestas llegaron hasta la sede del PDeCat, de donde el exconseller Jordi Baiget salía al grito de "traidor".
Tensión que coincidía con una manifestación convocada por estudiantes que ha cambiado su destino, terminado con protestas frente al Palau de la Generalitat. Los independentistas no quieren elecciones, quieren la independencia.
Pero todo cambia: pasan de las protestas al silencio absoluto porque Puigdemont comparece. Poco más de cinco minutos después, no hay elecciones y la plaza estalla en gritos de independencia.
Finalmente, Puigdemont sale a pie y la gente aplaude al hombre que horas antes era tildado de "traidor".
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