Los soberanistas concentrados frente a la sede del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) mantendrán durante toda la noche de este jueves la protesta contra la detención de catorce altos cargos del Govern por la organización del referéndum del 1 de octubre, suspendido por el Tribunal Constitucional.
La protesta ha empezado al mediodía para rechazar la operación dirigida por el juzgado de instrucción número 13 de Barcelona y, en algunos momentos, ha llegado a congregar a más de 20.000 personas en el paseo Lluís Companys de Barcelona, donde se encuentra el monumento del Arco de Triunfo.
El ambiente ha sido en todo momento tan reivindicativo como festivo, ya que las entidades independentistas han instalado altavoces y casi todo el rato ha sonado música catalana de fondo, de grupos populares como Txarango, Els Catarres y Lax'n Busto.
Las entidades impulsoras de la protesta, la Asamblea Nacional de Cataluña (ANC) y Òmnium Cultural, han llamado a permanecer toda la noche del jueves en la avenida barcelonesa en solidaridad con los detenidos, y han pedido a los manifestantes que se queden a dormir que, a partir de la medianoche, guarden silencio por respeto a los vecinos.
En la foto de la manifestación han primado las banderas independentistas, esteladas, y las camisetas reivindicativas, con el amarillo como color predominante. En cuanto a los cánticos, se han repetido algunos ya clásicos estos días, como "votaremos", "independencia", "democracia", "las calles serán siempre nuestras" y "con Franco esto sí que pasaba", y se ha añadido con fuerza el grito de "libertad", en referencia a los detenidos que aún permanecen bajo el arresto.
Pasadas las 22:00 horas, el clima era plenamente festivo, con actuaciones musicales en directo, y se han empezado a ver las primeras sillas y alguna tienda de campaña de quienes se han decidido a pasar la noche en frente del TSJC.
Los concentrados han podido participar también en la cacerolada que hoy se ha repetido de nuevo en numerosos puntos de la capital catalana, donde numerosos vecinos han salido a los balcones y a las calles para hacer sonar ollas y sartenes en protesta por la operación policial contra el 1-O.