Las historias más sorprendentes de personas que ganaron el Gordo de Navidad

Desde 1812, España conmemora anualmente el Sorteo Extraordinario de Navidad, un evento que derrama la fortuna entre los afortunados ganadores. El próximo 22 de diciembre de 2023, la Lotería de Navidad distribuirá un asombroso total de 2.408 millones de euros en premios.

No se deben subestimar los restantes galardones que se sortearán, ya que, aunque no se comparen en cuantía, siempre ofrecen un respaldo económico apreciable. Estos se conocen como premios "menores", abarcando categorías como las aproximaciones, centenas, terminaciones, la pedrea y el reintegro. El Sorteo de Navidad se llevará a cabo a partir de las 9:00 de la mañana, manteniendo la hora de aparición del ansiado 'Gordo' de Navidad como una incógnita intrigante.

Estas son algunas historias

Durante más de dos siglos, los agraciados en el sorteo han tejido relatos memorables en torno a los premios, algunos más emocionantes que otros, pero todos con un legado imperecedero. Vale la pena rememorar algunos de estos casos destacados.

En el año 2020, la espera se prolongó hasta el mediodía para desvelar al afortunado ganador de la Lotería de Navidad. Sin embargo, el episodio más dilatado en la historia de este sorteo se remonta al año 2014, cuando el número 13437 no hizo su entrada triunfal hasta las 13:00 horas.

Por otro lado, en un giro de fortuna tempranero, el 'Gordo' más madrugador de la historia del sorteo hizo su entrada en el año 2004. A las 9:19 de la mañana, con tan solo 39 bolas del segundo alambre de la primera tabla extraídas, el número 54600 emergió, otorgando un premio de 4 millones de euros.

En el año 2022, una destacada protagonista, Perla, se alzó con el codiciado premio del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad. Sin embargo, su triunfo no se limitó a un solo billete, sino que fue agraciada con la suerte de poseer 95 participaciones en el sorteo.

El camino hacia esta inesperada fortuna estuvo marcado por un episodio singular en su vida. Perla, conmovida por un sueño revelador en el que su padre le instó a participar en la lotería, se vio inspirada a adquirir múltiples décimos y acudir al majestuoso recinto del Teatro Real, donde desplegó una colección de amuletos con la esperanza de materializar aquel enigmático presagio. En sus propias palabras, "se cumplió el sueño".

Perla, antes de su inesperada victoria, había dedicado dos décadas de su vida al servicio en el Palacio de la Moncloa. Sin embargo, su trayectoria laboral sufrió un giro infortunado al ser despedida de dicho empleo. Se encuentraba en la situación de desempleo, siendo madre de dos hijos y, había comenzado a recibir el subsidio. Para Perla, esta inesperada victoria representaba un acto de justicia divina que le había permitido hallar un nuevo rumbo en su vida.

Su primera prioridad con los fondos en cuestión consistirá en adquirir una residencia destinada a sus hijos, sufragar los gastos universitarios y efectuar una generosa contribución a la Iglesia con el propósito de asistir a aquellos que se encuentran en situación de mayor necesidad.