Afganistán
Así es la misión casi imposible para conseguir un vuelo con el que salir de Kabul
Esta madrugada ha llegado a Madrid el primero de los tres aviones enviados a Afganistán para evacuar a españoles y afganos. Se calcula que aún quedan 800 personas por traer a España, y la operación no es nada sencilla.
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El avión A400 de las Fuerzas Armadas con el primer grupo de evacuados de Kabul ha aterrizado en la madrugada de este jueves en la base aérea militar de Torrejón de Ardoz (Madrid) con 53 personas a bordo, cinco de ellas españoles y 48 afganos.
Las labores de evacuación no son una tarea sencilla, pese al pacto de no agresión al que han llegado EEUU y los talibanes: las tropas estadounidenses controlan la gestión del aeropuerto de Kabul mientras los fundamentalistas islámicos patrullan las inmediaciones del recinto.
A diario se repiten las escenas de caos, debido a que los ciudadanos afganos -hombres, mujeres y niños- intentan a la desesperada acceder a algunos de los aviones que dejan atrás el terror talibán.
Se calcula que todavía quedan en suelo afgano 800 personas que el Gobierno español debe traer a nuestro país entre personal de la embajada, policías y ciudadanos autóctonos que han colaborado con la delegación española.
"Los 100 primeros ya están en Madrid"
Mientras José Manuel Albares y José Luis Escrivá, ministros de Exteriores y Seguridad Social, respectivamente, han evitado concretar el número total de personas que serán evacuadas por el Ejecutivo español, el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, ha confirmado que los pasajeros del primer avión eran personas que trabajan para la UE en Kabul.
"Los primeros 106 ya están en Madrid", ha anunciado Borrell por videoconferencia en una sesión extraordinaria de las comisiones de Asuntos Exteriores y Desarrollo del Parlamento Europeo para abordar la crisis en Afganistán.
El político español ha afirmado, asimismo, que su "primera responsabilidad" como responsable del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) es traer de vuelta a suelo europeo a las 400 personas que han trabajado para la UE en Afganistán, así como a sus familias.
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