Algunos de los asistentes tuvieron tiempo de grabar con sus cámaras domésticas el momento en que caía la estructura que sustentaba el escenario en el que poco después iba a celebrarse un concierto. Sucedió en Indianápolis. El viento apareció de forma repentina y con gran intensidad.
Fallecieron cuatro personas y otras cuarenta resultaron heridas.