En el texto preparado para la oración del Ángelus dominical el pontífice ha agradecido la labor de todo el personal sanitario y ha expresado su preocupación por lo que está sucediendo en Siria.
El tratamiento para la fiebre de Lassa generalmente incluye antivirales, además de medicamentos para controlar la presión arterial y oxígeno, aunque no existe una vacuna disponible en la actualidad.