La declaración, difundida por la Casa Blanca, pone a disposición de los gobiernos y comunidades locales los fondos, equipos y personal del Gobierno Federal necesarios para afrontar las consecuencias del desastre y socorrer a los damnificados por la tormenta, que ha matado en EEUU a más de una docena de personas. De esta forma, la decisión "permite que los fondos federales estén disponibles para las personas afectadas en los barrios de Bronx, Kings, Nassau, Nueva York, Richmond, Suffolk y Queens", dice el comunicado.
La tormenta ha dejado a millones de personas sin suministro de electricidad desde Maine a Carolina del Norte, ha forzado la suspensión de más de 13.000 vuelos de aerolíneas comerciales en más de una docena de aeropuertos del Este del país, y mantiene suspendidas las actividades de los gobiernos en la región.
El Servicio de Pronósticos Hidrometeorológicos indicó que el centro del ciclón post tropical se mueve por el sur de Pensilvania y podría dirigirse el miércoles hacia Canadá. A su paso por el Caribe, como huracán, "Sandy" causó decenas de muertes, y ha dejado por lo menos 15 muertos en EE.UU. y uno en Canadá desde que tocó tierra en Nueva Jersey el lunes de noche convertido en tormenta.
La llegada a tierra firme de "Sandy" con vientos sostenidos de 125 kilómetros por hora, levantó marejadas de hasta cuatro metros en áreas de Nueva Jersey y Nueva York. De momento, la reducción del nivel de las aguas, que gracias al descenso de la marea han bajado casi dos metros en el Bajo Manhattan desde su punto culminante, ha relajado un poco la situación, si bien algunas rachas de viento que todavía persisten, próximas a los 100 kilómetros por hora, recuerdan que "Sandy" sigue cerca.
Nueva York y su área metropolitana (19 millones de habitantes) amanecieron sin transporte público, con importantes interrupciones del suministro eléctrico y con todos los aeropuertos y casi todos los puentes y túneles de la ciudad cerrados. Las escuelas, universidades, museos, grandes sedes empresariales, la sede de Naciones Unidas y la bolsa de Nueva York seguirán cerradas hoy, lo que contribuirá a aligerar el tráfico.
En el Estado de Nueva York, 1,5 millones de personas se han quedado sin electricidad y hay varios muertos por la tormenta, entre ellos un hombre de 30 años al que le ha caído encima un árbol en Queens. También los túneles del metro de Nueva York han quedado inundados por la crecida del nievel del mar causada por Sandy. Los cortes de energía han sumido en la oscuridad de la mitad sur de Manhattan.