El primer ministro de Reino Unido, Borish Johnson, ha prometido sentencias más duras de prisión para violadores y terroristas en respuesta al atentado que tuvo lugar este viernes en el Puente de Londres y que dejó dos muertos y cinco heridos a manos de un joven que ya había cumplido condena en el país por terrorismo.
"Es hora de imponer sentencias más duras para los responsables de delitos violentos graves y para los terroristas", ha afirmado Johnson en declaraciones en un programa de la BBC. "Condeno completamente que este hombre estuviera en la calle. Creo que es absolutamente repulsivo y vamos a tomar medidas", ha remachado.
Johnson argumenta además que "obviamente" hay que invertir más en financiar el sistema de justicia penal porque "lo que estamos haciendo ahora con esta nueva administración conservadora de una sola nación (...) es el nuevo enfoque, el camino para afrontar la cuestión de los servicios públicos"
El primer ministro británico, que está ya inmerso en plena campaña electoral de cara a los comicios del próximo 12 de diciembre, busca identificar a su rival del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, como un líder "blando" con los delitos y atribuye a los laboristas la ley que permite la libertad condicional para presos que hayan cumplido la mayor parte de sus condenas.
Por su parte, Corbyn, un veterano activista por los Derechos Humanos, defiende que no es necesario que los condenados por terrorismo cumplan las penas íntegras y defiende los beneficios penitenciarios así como que se tenga en cuenta la naturaleza del delito. "Depende de la sentencia, pero fundamentalmente depende de lo que hayan hecho en prisión", ha afirmado Corbyn en Sky News.
En lo que ambos líderes están de acuerdo es en que los policías no tenían más alternativa que disparar al sospechoso, fallecido por disparos de los agentes pese a haber sido reducido por transeúntes.
