La Comisión Europea recalca que las sanciones impuestas a los altos cargos de Venezuela son de obligado cumplimiento, pero precisa que quien vigila que se cumplan son los propios países.
Si la vicepresidenta de Nicolás Maduro hubiera pisado suelo comunitario, es el ministerio de Exteriores español quien debería informar de ellos. Sin embargo, la Comisión Europea no ha sido capaz de delimitar si la terminal de tránsito de Barajas es suelo comunitario.
Desde Bruselas solo insisten en que esas 26 personas transitadas no deben estar ni transitar por la Unión Europea.