Los buques de la UE interceptarán los barcos de los traficantes de personas

En los nueve primeros meses del año han muerto en el mar cerca de 3.000 inmigrantes. Otros muchos son rescatados por la Guardia Costera italiana. Abandonados a su suerte por contrabandistas. Mafias que controlan las rutas de la  inmigración.

Hasta ahora las sucesivas misiones de la Unión Europea se limitaban a la vigilancia y el rescate pero a partir de ahora podrán registrar, retener incluso desviar las embarcaciones sospechosas de traficar con seres humanos.

La operación ha recibido el nombre de Sofía por esta niña somalí que nació en una fragata alemana cuando su madre a punto de dar a luz fue rescatada en las costas de Libia.

Las patrullas se centrarán en las aguas internacionales del Mediterráneo frente a la costa norte de Libia. A diario, las mafias llenan hasta con el doble de su capacidad una veintena de barcazas abarrotadas de inmigrantes que sueñan con cambiar su suerte en Europa.

Hasta el mes de Octubre, los inmigrantes que han atravesado el Mediterráneo son 557.899, que es precisamente el doble que los que llegaron el año pasado.

Esa ruta se ha convertido en un cementerio en el mar. Sobre todo en el trayecto entre las costas de Libia e Italia.

Es la más peligrosa: 2.447 inmigrantes perdieron la vida en 2014. Hasta octubre de este año la cifra ha aumentado a los 2.700. Llama la atención los 259 fallecidos en la ruta entre Turquía y Grecia. Casi 3.000 muertos en los nueve primeros meses.

La “operación Sofía” se ha fijado como objetivo  desmantelar las redes de traficantes y evitar más muertes en el Mediterráneo. Las fragatas de la Unión Europea sin embargo sólo podrán actuar en aguas internacionales. Nunca en la costa libia.  Sólo una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU podría permitirlo.