El Capitolio blindado y otras medidas de seguridad para la toma de posesión de Donald Trump

Este 20 de enero de 2025, Washington será escenario de una de las ceremonias más vigiladas de la historia de Estados Unidos: la toma de posesión de Donald Trump como el 47º presidente del país estadounidense. En medio de un clima de tensión política y posibles actos de violencia, la ciudad se encuentra completamente blindada por un dispositivo de seguridad que incluye más de 25.000 agentes de seguridad y un despliegue tecnológico de última generación.

La seguridad ha sido diseñada para garantizar que la ceremonia de juramento, que tendrá lugar en el Capitolio a las 12:00 horas, se desarrolle sin problemas. Un perímetro de 48 kilómetros de vallas rodea las principales áreas de la ciudad, desde la Casa Blanca hasta el Capitolio, pasando por la famosa Avenida Pensilvania, por donde se llevará a cabo el desfile presidencial. Estas medidas de seguridad se complementan con puntos de control, restricciones de tráfico y francotiradores posicionados en los tejados de los edificios cercanos.

La Policía Metropolitana de Washington, en colaboración con otros cuerpos de seguridad, tiene como objetivo mantener el orden durante los actos de toma de posesión y las multitudinarias manifestaciones que se esperan en la capital estadounidense. Aunque la ceremonia atraerá a una menor cantidad de asistentes que en anteriores investiduras, las autoridades estiman que más de 250.000 personas se reunirán en la Explanada Nacional y sus alrededores.

A lo largo de la capital, los desplazamientos se verán alterados por controles de acceso y la regulación del sistema de transporte público. Más de 900 agentes estarán destinados a vigilar el metro de la ciudad, y las calles principales estarán bloqueadas con camiones para evitar cualquier intento de ataque.

Las autoridades han señalado que la mayor amenaza para la seguridad proviene de los llamados "lobos solitarios", es decir, personas que podrían llevar a cabo ataques aislados sin conexión con grupos organizados. Esta preocupación ha aumentado debido a los incidentes ocurridos en las últimas semanas, como el atropello masivo en Nueva Orleans que acabó con la vida de 14 personas o el atentado en Las Vegas frente a un hotel. Además, la policía ha señalado que ya ha habido intentos de ataque cerca del Congreso, lo que hace aún más urgente el gran despliegue de seguridad.

El Servicio Secreto, bajo la dirección del agente Matt McCool, ha afirmado que confían al 100% en el plan de seguridad diseñado para este evento. Sin embargo, el jefe de la policía del Capitolio, Thomas Manger, ha indicado que, aunque de momento no se han identificado amenazas, el riesgo sigue presente, lo que obliga a mantener el nivel de alerta.

El dispositivo de seguridad también incluye el uso de drones de vigilancia, unidades tácticas móviles y aeronaves de reconocimiento, que patrullarán el área para prevenir cualquier acción sospechosa. Mientras tanto, el FBI y el Departamento de Seguridad Nacional están trabajando en coordinación para monitorear cualquier posible amenaza tanto a nivel local como internacional.

Ahora, mientras algunos temen que las protestas se conviertan en actos de violencia, otros se preparan para manifestarse. La ciudad será escenario de numerosas marchas, incluida una protesta masiva programada antes de la toma de posesión, en la que se espera que 25.000 personas participen.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com

VÍDEO | La espectacular persecución policial para rescatar a un taxista secuestrado: varios disparos y accidente final