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ANTE EL AUMENTO DEL USO DE OPIÁCEOS
La Casa Blanca plantea la posibilidad de imponer la pena de muerte a narcotraficantes
El plan se dará a conocer por el presidente, Donald Trump, en un acto en Nuevo Hampshire, el tercer estado con mayor proporción por sobredosis de opiáceos. La propuesta plantea la posibilidad de condenar a pena capital a los criminales que hayan cometido actividades de tráfico de drogas y sean "directamente responsables" de la muerte de alguien. Esta medida se plantea debido al aumento del consumo de opiáceos que en los últimos años se ha convertido en la causa más común de muerte violenta en EE.UU.
El gobierno de Trump está barajando la posibilidad de imponer la pena de muerte a los criminales que trafican con drogas y con analgésicos opiáceos, responsables de un número creciente de muertes por sobredosis en EE.UU., informaron este la cadena CBS y el diario Político. La propuesta sobre la pena capital se incluye en un paquete de medidas que está elaborando la Casa Blanca y que busca acabar con la epidemia de abuso de opiáceos que sufre el país.
Según CBS y Politico, que citan funcionarios de la Casa Blanca, el presidente, Donald Trump, dará a conocer el plan el lunes durante un acto en Nuevo Hampshire, el tercer estado con la proporción por sobredosis de opiáceos más alta del país por detrás de Virginia Occidental y Ohio.
Este sería el primer viaje de Trump a Nuevo Hampshire desde que llegó a la Casa Blanca, aunque visitó el estado en numerosas ocasiones durante la campaña presidencial. A principios de mes en un acto en la Casa Blanca, Trump ya sugirió que EE.UU. podría seguir el ejemplo de otros países que imponen la pena de muerte a sus narcotraficantes.
Según los detalles filtrados a Político y CBS, el plan de la Casa Blanca incluye la posibilidad de que sean condenados a pena capital aquellos criminales que, de manera probada, cometieron actividades de tráfico de drogas que fueron "directamente responsables" de la muerte de alguien por sobredosis.
En concreto, la Casa Blanca habla de muertes por analgésicos opiáceos, que pueden obtenerse con receta o en el mercado negro, y también se refiere al fentanilo, un analgésico que suele destinarse al tratamiento del cáncer, aunque en los últimos años es usado por grupos criminales para aumentar la potencia de la heroína. Además, según medios, el plan de la Casa Blanca propone crear dentro del Departamento de Justicia una unidad dedicada a combatir la venta en Internet de opiáceos.
La Casa Blanca también incluye en su plan una propuesta para cambiar cómo el Gobierno paga por las prescripciones de potentes medicamentos contra el dolor. Precisamente, el origen de la crisis actual de adicción en EE.UU. se encuentra en la gran cantidad de analgésicos altamente adictivos que durante décadas recetaron los médicos, impulsados en parte por las aseguradoras sanitarias que prefieren las pastillas al ser menos costosas que otros tratamientos alternativos.
En los últimos seis años las muertes por sobredosis se han convertido en la causa más común de muerte violenta en EE.UU., por encima de los accidentes de tráfico o las armas. Según datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), 64.000 personas murieron en 2016 por sobredosis de opiáceos (incluida la heroína) en Estados Unidos, lo que supone el fallecimiento de 175 estadounidenses al día y siete víctimas mortales cada hora.
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