El éxito de la nueva primera dama de China, Peng Liyuan, quien en su primer viaje al extranjero con su marido el presidente Xi Jinping ha recibido muchos elogios por su elegancia, ha aumentado la popularidad de las marcas de moda del país asiático, donde durante años han primado las firmas de Occidente.
Ni Louis Vuitton, ni Chanel, ni Hermes... esta semana, las chinas que quieren ir a la moda acuden en masa a las tiendas de una firma local, Exception, porque ésa es la marca del bolso y el abrigo que Peng llevaba el pasado fin de semana a su llegada a Moscú, en el primer viaje oficial del presidente Xi.
Según relata el diario "Global Times", muchas mujeres chinas han acudido esta semana a tiendas de la franquicia en ciudades como Pekín, Shanghái o Chengdu para pedir a las dependientas un bolso negro igual al que llevaba la primera dama en Rusia, aunque el modelo de Peng era hecho por encargo.
De hecho, las marcas de moda chinas han aumentado su cotización en la bolsa local, lo que, según la prensa, se debe a previsiones de que las firmas autóctonas se aprovechen del fulgurante éxito de la primera dama. La buena impresión de Peng, de 50 años, continuó en Tanzania, segunda parada de la gira de XI, su esposa desembarcó del avión presidencial vistiendo un radiante vestido blanco con bolso a juego.
Peng aparece en portadas de diarios de gran tirada como el "Nuevo Beijing", algo poco habitual con las anteriores esposas de mandatarios chinos, durante la reunión de Xi con el presidente tanzano Jakaya Kikwete.
En las fotos, Peng luce un vestido de aires más tradicionales, en un austero color ocre, complementado con un "foulard" violeta que, como en anteriores ocasiones, hace juego con la corbata de su marido.
"Es la primera vez que una primera dama de China aparece como una mujer moderna que viste bien, con buen gusto y confianza", aseguraba ante las apariciones de Peng el editor de la versión china de "Vogue", quien opina, en declaraciones al "South China Morning Post", que la aparición de una primera dama mediática en el país "es un acontecimiento histórico".
Para las marcas chinas también es una gran oportunidad, señalan los expertos, de la misma forma que figuras como Michelle Obama o Carla Bruni promocionaron marcas locales.
"Las grandes marcas de lujo de Europa o América han sido las favoritas para muchos consumidores chinos ricos, pero las firmas locales llamarán más la atención en el futuro, cuando Peng muestre su elegancia con ellas", subrayó al respecto el experto en moda Hong Dongni, también en declaraciones al diario hongkonés.
Peng es famosa desde hace tres décadas en China, antes incluso de conocer a su actual marido, ya que es una reconocida soprano que ha actuado en galas televisivas del país asiático desde los años ochenta. Desde el ascenso político de su marido ha dejado casi completamente los escenarios, desviando su actividad a causas benéficas como actividades de apoyo a afectados por el VIH-sida.