Los choques entre los rebeldes sirios y las fuerzas gubernamentales se recrudecieron hoy en distintos barrios dentro de Damasco, que fueron también bombardeados, según los opositores, mientras que el régimen sostiene que persigue a grupos terroristas.
En declaraciones a Efe por teléfono, el activista Abu Qais al Shami, vecino de uno de los barrios más castigados, Al Tadamun, explicó que durante los enfrentamientos se usaron armas ligeras, proyectiles de mortero y granadas autopropulsadas.
Al Shami detalló que el ejército intentó irrumpir en este distrito, situado en el centro de la capital, pero el opositor Ejército Libre Sirio (ELS) se lo impidió y ahora hay solo presencia policial en su interior.
Aparte de los choques y bombardeos, grupos de "shabiha" (milicianos progubernamentales) han quemado tiendas y saqueado algunas viviendas, denunció. Según el testigo, en el barrio reina en estos momentos una tensa calma y las calles están desiertas después de que hace dos horas muchos residentes se trasladaran a zonas cercanas más seguras.
Aun así, destacó que muchos vecinos no han podido abandonar sus casas por los bombardeos y la presencia de francotiradores en las azoteas de los edificios. De acuerdo a la versión del régimen sirio, los efectivos de seguridad persiguen hoy a un supuesto grupo terrorista en el barrio de Naher Aisha, vecino al de Al Tadamun.
Una fuente oficial, citada por la agencia de noticias siria Sana, subrayó que durante la operación han fallecido varios supuestos terroristas, sin ofrecer cifras. El citado grupo llegó a Naher Aisha tras escaparse de Al Tadamun, afirmó la fuente, que sostiene que los presuntos terroristas detonaron ayer varios artefactos explosivos en ese barrio.
Por su parte, la Comandancia Central del ELS dentro de Siria informó en un comunicado de que los rebeldes también se enfrentaron al ejército y a las fuerzas de seguridad en los barrios damascenos de Al Midan y Al Zahira.
El ELS, integrado por militares desertores y civiles que han empuñado las armas, denunció "una escalada (de la violencia) sin precedentes por parte del régimen para acabar con la revolución en la capital".
Los insurgentes destacaron que hay francotiradores apostados en las azoteas de edificios como la sede del Ministerio de Transportes, las oficinas de la Media Luna Roja y de los bomberos en el área de Al Zahira, en el sur de la ciudad.
Durante esta jornada, se ha cortado, además, el tráfico por la carretera que une Siria con Jordania, a la altura de Damasco, si bien el motivo es distinto según la fuente.