La ciudad de Los Ángeles se prepara para un atasco monumental

La imagen se repite cada fin de semana. Medio millón de vehículos circulan por la autovía 405 bajo el puente de Mulholland Drive. Este fin de semana lo van a demoler para construir uno nuevo, con más capacidad. Las obras obligan a cerrar un tramo de 16 kilómetros de la autovía durante 52 horas. Los habitantes de Los Ángeles se preparan para un atasco monumental. Lo llaman el fin del mundo.

El tráfico se va a desviar por carreteras secundarias y por el centro de la ciudad, convirtiendo un trayecto de 20 minutos en un viaje de tres horas. Las autoridades llevan semanas avisando del cierre y pidiendo a los conductores que se queden en casa.

El mensaje del alcalde, de famosos de Hollywood y la cuenta atrás en una web oficial, añaden tensión a un fin de semana caótico. Mediados de julio, zona de playa y calor. No parece el mejor plan para pasarlo en un coche.