Colombia celebra el cuarto aniversario del histórico Acuerdo de Paz con las FARC que acabó con la guerrilla más antigua de América Latina. La tarde del 24 de noviembre de 2016 el jefe de las antiguas FARC-EP, Rodrigo Londoño, alias Timochenko, y el entonces presidente, Juan Manuel Santos, firmaban los Acuerdos de Paz en el Teatro Colón de Bogotá.
52 años de violencia y muertes
Con aquella firma se ponía fin oficial a 52 años de guerrilla. A un sangriento enfrentamiento que dejó 220.000 muertos y más de seis millones de desplazados en Colombia. El camino para llegar hasta aquí fue largo. El 29 de agosto de 2016 entraba en vigor el alto el fuego definitivo, pero era necesario escenificar una paz que se había buscado durante los años 80 y 90. Hubo conversaciones durante los mandatos de Belisario Betancur (1982-1986), Virgilio Barco (1986-1990), César Gaviria (1990-1994) y Andrés Pastrana (1998-2002), todas sin resultados.
4 años más tarde las FARC, que no cambió sus siglas pero si su significado, son ahora la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común y tienen representación política en el Congreso. El pacto les garantiza 10 asientos en el Parlamento de 268 escaños por dos períodos legislativos.
De 20.000 miembros a 7.000
En sus años de gloria llegaron a ser 20.000 miembros. En el momento de la rendición eran unos 7000. Hombres y mujeres que han tenido que reinventarse en la vida civil. Y aquí es donde las FARC denuncian, a día de hoy, el incumplimiento de las promesas.
El documento acordado entre el Estado y las FARC-EP recoge los siguientes puntos:
- Solución al problema de las drogas ilícitas
- Implementación, verificación y refrendación.
Y lo que más preocupa: la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), que juzgará los crímenes atroces cometidos durante el conflicto.
Las quejas de los miembros de las FARC
Mientras el tiempo pasa, los ex guerrilleros lamentan que solo la mitad de los planes han sido adoptados formalmente y ponen como ejemplo el acceso a tierras. Según cifras oficiales, solo se han distribuido 32.000 hectáreas de los 3 millones que exige el acuerdo, es decir, el 1 %.
Las masacres han dado paso a asesinatos selectivos. De acuerdo con el Instituto Nacional de Desarrollo para la Paz (Indepaz) en lo que va de año se han asesinado a 258 líderes sociales y defensores de Derechos Humanos, así como 77 masacres que han dejado 309 víctimas mortales. Víctimas que ahora se achacan a los disputas del narcotráfico
