El papa ha recibido este sábado en el Vaticano al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, en un encuentro con mayor calado político que de costumbre en el que el pontífice pidió a Sánchez "construir la patria con todos" y le alertó del peligro de las ideologías que "desfiguran" dicha patria.
El papa nunca lleva mascarilla en el Vaticano
La visita ha dejado por otra parte una imagen chocante en este momento, la de todos los protagonistas de esta visita -anfitriones e invitados- sin mascarillas. Algo habitual, no obstante, en el papa, que nunca la lleva puesta en el Vaticano.
Fuentes de Moncloa han justificado la retirada de las mascarillas al subrayar que han seguido las instrucciones del Vaticano y que así ha sido el protocolo. De hecho, cuando Sánchez llegó fue recibido por el regente de la Casa Pontificia, Monseñor Leonardo Sapienza, quien, sorprendentemente, iba sin mascarilla en otra de las imágenes más comentadas.
Acompañado de su esposa, Sánchez llegó con anticipación esta mañana -algunos minutos antes- y ha pasado en el Vaticano dos horas, en las que además de la audiencia con el papa, que ha durado 35 minutos, se ha reunido con el secretario de Relaciones con los Estados, el Arzobispo Paul Gallagher.
Ha tenido lugar en este tiempo también el encuentro de Francisco con la delegación española, momento que el pontífice ha aprovechado para hacer un inusual discurso en este tipo de visitas.
Francisco ha reconocido ante Sánchez la "difícil misión" de un gobernante para "hacer progresar el país, consolidar la nación y construir la patria" y ha subrayado: "Construir la patria con todos".
"Es bastante trabajo, no es fácil, transmítalo a los miembros de su Parlamento, lo que piensa el papa de esto", le ha dicho el papa a Sánchez, quien hace tan solo dos días salía airoso de la moción de censura presentada por Vox que fue rechazada por el resto de partidos.
También lanzó el papa en este discurso de varios minutos otro aviso a Sánchez. El del riesgo que corre un país cuando lo dominan las ideologías. "Es muy triste cuando las ideologías se apoderan de la interpretación de una nación, de un país y desfiguran la patria", dijo.
Intercambio de regalos
Ha sido el final de una jornada marcada también por la solemnidad y el protocolo, en la que no ha faltado el intercambio de regalos: Un facsímil del Libro de Horas del obispo Juan Rodríguez de Fonseca por parte de Sánchez al papa, y un bajorrelieve en bronce y la copia de sus documentos del pontífice al presidente del Gobierno. El papa también ha regalado a Sánchez su mensaje de la paz de este año.