El Reino Unido abandona esta noche -a las 23.00 GMT- la Unión Europea (UE), 47 años después de su ingreso en el bloque europeo, para iniciar un nuevo camino, en el que buscará una nueva relación con Europa y negociará acuerdos comerciales.
El Parlamento escocés demandó el pasado miércoles la posibilidad de exigir la celebración de un nuevo referéndum de independencia tras el 'brexit' debido a que las circunstancias han cambiado ahora que Reino Unido finalmente ha logrado la ratificación del acuerdo por parte de la Eurocámara.
Los diputados aprobaron la medida con 64 votos a favor y 54 en contra y han respaldado así las palabras de la ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, que ha pedido al primer ministro, Boris Johnson, celebrar el plebiscito este año, para lo que espera contar además con el visto bueno el Gabinete británico.
No obstante, Johnson ha rechazado la petición y ha manifestado que el referéndum de 2014 fue una situación que se dio "una vez en una generación", según ha informado la cadena de televisión local BBC.
Este viernes, horas antes de que el país abandone formalmente la UE, Sturgeon dará un discurso en que anunciará cuáles son "los próximos pasos" tras la negativa de Londres, que, según algunos analistas, podrían pasar por recurrir a los tribunales.
Su objetivo es celebrar un plebiscito a finales de este año, aunque la reiterada negativa del gobierno central podría hacer inviable que la consulta pudiese cumplir con todos los plazos en el transcurso de este año, por lo que algunos expertos apuntan a que es más probable que tenga lugar tras las elecciones regionales de mayo de 2021.
Escocia quiere su propio visado para recibir inmigrantes tras el 'brexit'
El Gobierno de Escocia ha solicitado al Ejecutivo británico poder crear su propio sistema de visados para gestionar la llegada de personas inmigrantes, para contrarrestar así la baja tasa de natalidad y el impacto de la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).
La ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, pidió al jefe del Ejecutivo británico, Boris Johnson, que transfiera al Parlamento escocés las competencias en materia de migración, que están reservados al Gobierno central, a lo que ya se ha negado. El objetivo de Sturgeon es crear un "visado escocés", que sería mucho más flexible que el que se implantará en el resto del Reino Unido tras el 'brexit'.
Sturgeon señaló que este sistema no contaría con algunos de los requisitos que requerirá el ministerio del Interior británico como altas tasas de solicitud, un umbral salarial determinado o el patrocinio del empleador. Sturgeon dijo que poner fin a la libre circulación dentro de la UE dañará al Reino Unido en su conjunto, pero será "excepcionalmente perjudicial" para la economía y los servicios públicos de Escocia.