Congresistas demócratas se arrodillaron silenciosamente este lunes en el Congreso de Estados Unidos para rendir homenaje a George Floyd, asesinado a manos de un policía blanco, antes de presentar una reforma del sistema policial en respuesta a la muerte de ciudadanos negros a causa de la violencia policial.
A la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y al líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, se sumaron casi 20 congresistas más en el Salón de la Emancipación, llamado así en homenaje a los esclavos que construyeron el Capitolio en el siglo XVIII.
Estuvieron durante casi nueve minutos en silencio, tiempo que un policía estuvo asfixiando a Floyd con su rodilla el 25 de mayo en Minneapolis.
Los demócratas aseguran que su proyecto busca generar "un cambio significativo, estructural, que garantice el derecho de todos los estadounidenses a la seguridad y la igualdad ante la justicia".
La iniciativa quiere "terminar con la brutalidad, hacer responsable a la policía y mejorar la transparencia" de sus acciones, apuntan en un comunicado.
El afroamericano que se ha convertido en símbolo de las protestas racistas en todo el mundo y hoy será enterrado en Houston, ciudad donde vivía. Las multitudinarias manifestaciones contra el racismo no han cesado, pero se ha desvanecido la violencia de las jornadas iniciales.
