Una jueza federal de Estados Unidos ha condenado al Gobierno norcoreano a pagar más de 500 millones de dólares a los padres de Otto Warmbier, en concepto de indemnización por las torturas que sufrió durante los 17 meses que estuvo apresado por Pyongyang y por su posterior muerte.
Los padres de Warmbier, Fred y Cindy, demandaron a Corea del Norte en abril por la muerte de su hijo. El joven de 22 años fue detenido en 2016 por robar material propagandístico del hotel donde se alojaba. Fue liberado gracias a las gestiones diplomáticas de Estados Unidos, pero con severos daños cerebrales. Murió una semana después de regresar.
La jueza federal Beryl A. Howell ha considerado que los Warmbier "han experimentado en primera persona la brutalidad de Corea del Norte", que usó a su hijo "como un peón en la partida global de este Estado totalitario contra Estados Unidos".
Howell ha estimado que los Warmbier han aportado "amplias evidencias" de los daños que alegan haber sufrido en su demanda a causa de la "toma de rehén", "tortura" y "ejecución extrajudicial" de su hijo. Por ello, les concede una suma de más de 500 millones de dólares que incluye seis millones de dólares por el lucro cesante, es decir, por las ganancias que el joven habría obtenido a lo largo de su vida, a juzgar por su excepcional talento, ha argumentado Howell.
Los padres de Warmbier han emitido un comunicado en el que dan las gracias a la jueza por evidenciar que "el régimen de Kim (Jong Un) es responsable legal y moralmente de la muerte de Otto". Este fallo es "un significativo paso en nuestro camino", han destacado.
Corea del Norte ha negado en varias ocasiones que Warmbier fuera torturado, pero ha preferido no responder a la demanda. La indemnización podría pagarse con los fondos norcoreanos que han sido bloqueados en Estados Unidos, de acuerdo con el Departamento del Tesoro, citado por CNN.
