Wuhan, la ciudad donde se ha originado la extraña neumonía que ya ha matado a 17 personas en China e infectado a más de 500 en al menos cinco países, ha quedado aislada del resto del país. Once millones de personas han quedado confinadas en la ciudad por el contagio del coronavirus, mientras la Organización Mundial de la Salud sigue estudiando si declara la emergencia internacional.
Este jueves ha entrado en vigor en Wuhan el veto que ya habían anunciado las autoridades del país. Hasta nuevo aviso, las personas que estén dentro de la región no podrán salir.
Después de que el gobierno anunciase esta medida y antes de que se hiciese efectiva, el nerviosismo se ha hecho notar en las calles y centros de transporte de la región. Autoridades chinas han confirmado el notable aumento de personas en estaciones de tren, autobús y aeropuertos este miércoles, con la intención de abandonar el Wuhan antes de que el cerco entrase en vigor.
Uso de mascarillas obligatorio
Los servicios de autobús, metro, ferry y cercanías se encontrarán suspendidos desde este jueves. Las autopistas también han sido cortadas, por lo que los coches particulares tampoco pueden abandonar la ciudad. Las autoridades locales de Wuhan requieren el uso obligatorio de mascarillas en el espacio público, para frenar la propagación del brote de coronavirus.
Las autoridades han ordenado a todas las agencias de viaje que suspendan los tours turísticos en la ciudad entre los días 22 de enero y 8 de febrero debido a la emergencia sanitaria, que se encuentra en nivel II. El Departamento de Cultura y Turismo ha pedido, además, que se cancelen las actividades en los principales monumentos turísticos y hoteles más importantes de la ciudad.
Las autoridades sanitarias chinas han afirmado que el contagio entre personas se produce principalmente por las vías respiratorias. Por ello, la prensa local y las redes sociales están saturadas de consejos sobre cómo prevenir contagios, como el uso de mascarilla, la necesidad de lavarse las manos frecuente y concienzudamente o cubrirse la boca y la nariz cada vez que se tose o estornuda.
La rápida propagación del coronavirus ha desembocado en el aumento de los controles en los aeropuertos internacionales. Un mes después de su detección sigue sin identificarse al completo el origen de este virus de neumonía con efectos letales. Sin embargo, todas las hipótesis apuntan a un mercado de marisco y pescado de la ciudad de Wuhan, por lo que se ha prohibido la venta de animales vivos en la ciudad.
