Guerra de Ucrania

La destrucción de la presa de Kajovka provoca una catástrofe humanitaria y un desastre ecológico en Ucrania

Al menos 7 personas desaparecidas y 80 localidades en peligro tras la destrucción de la presa de la central hidroeléctrica de Kajovka, en Jersón.

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Miles de personas de las localidades situadas en ambas riberas del río Dniéper han tenido que ser evacuadas ante la crecida de las aguas tras la rotura de la presa de la central hidroeléctrica de Kajovka, en el río Dniéper, cerca de Jersón. Ucrania y Rusia se acusan mutuamente de destruir el dique, lo que ha causado inundaciones en las inmediaciones y se está evacuando de urgencia a la población.

Las consecuencias en el entorno aún no se pueden evaluar con precisión, pero se calcula que las inundaciones podrían afectar a más de 40.000 personas: "Alrededor de 25.000 personas que viven en zonas bajo control ruso y otras 17.000 en territorio controlado por Ucrania deben evacuar", comunicó Viktoriia Lytvynova, fiscal general adjunta de Ucrania.

Además, según el gobernador de Jersón, hay al menos un muerto en un bombardeo en la región.

Una "bomba de destrucción masiva medioambiental"

Serhii Nayev, teniente general de las Fuerzas Armadas de Ucrania, aseguró en un encuentro con la prensa que el Estado Mayor había previsto la posibilidad de que las fuerzas rusas dinamitaran la presa de Nova Kajovka, lo que no impide que los planes de la contraofensiva ucraniana sigan en marcha. Pero Nayev también admitió que la prioridad ahora es la asistencia civil en la zona.

Si antes había que idear un asalto en puntos del río con una anchura de entre 500 metros y un kilómetro, ahora pasará a tener entre dos y tres kilómetros.

"Puede considerarse como el primer ecocidio en una guerra moderna"

Volodímir Zelenski calificó la voladura de la prensa de "bomba dedestrucción masiva medioambiental", pero afirmó también que "no detendrá a Ucrania y a los ucranianos". François Heisbourg, analista de referencia del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, afirmaba en la cadena LCI que el mundo estaba frente a "un acto que puede considerarse como el primer ecocidio en una guerra moderna".

Desde el otro bando, el presidente ruso, Vladímir Putin, calificó lo ocurrido de "acto bárbaro" acusando a Ucrania durante una conversación telefónica con su colega turco, Recep Tayyip Erdogan. Putin denunció que el supuesto ataque ucraniano ha provocado "una gran catástrofe ecológica y humanitaria", según ha informado el Kremlin en un comunicado.

Ginebra prohíbe ataques contra presas

Los Convenios de Ginebra prohíben explícitamente atacar las represas en una guerra, ya que esto representa un gran peligro para la población civil.

"Se trata de otra consecuencia devastadora de la invasión rusa de Ucrania"

Al respecto de lo sucedido, Antonio Guterres, secretario general de la ONU, ha afirmado que Naciones Unidas no dispone de informaciones correspondientes a la destrucción de la presa, "pero una cosa está clara: se trata de otra consecuencia devastadora de la invasión rusa de Ucrania", ha señalado.

"Es una catástrofe monumental humanitaria, económica y ecológica", ha expresado Guterres. "Inundaciones masivas. Evacuaciones a gran escala. Devastación medioambiental. Destrucción de cultivos recién plantados. Y amenazas añadidas a la muy amenazada central nuclear de Zaporiyzia, la mayor instalación nuclear de Europa".

Ayuda internacional

Tanto la Unión Europea como la OTAN se han sumado a las manifestaciones de condena por la voladura del dique. Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea, ha criticado la "brutalidad de la guerra de Rusia en Ucrania" antes de incidir en que el suceso supone una "nueva dimensión de las atrocidades rusas".

Además, los Estados miembros de la Unión Europa ya coordinan, bajo supervisión de la Comisión Europea, el suministro material humanitario de emergencia. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha explicado que ya están en marcha los trabajos para la entrega urgente a Kiev de bombas para retirar agua, mangueras contra incendios, estaciones móviles de depuración de agua y embarcaciones para facilitar la evacuación de civiles. "Estamos junto a Ucrania todo el tiempo que haga falta", ha señalado.

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