California

Detenido un hombre por intentar matar a sus hijos y su mujer precipitándose por un acantilado

El coche se precipitó 76 metros y, por suerte, todos los miembros de la familia sobrevivieron. Ahora, el padre ha sido detenido por presuntamente provocar conscientemente el accidente.

Vehículo precipitado por el acantilado

Vehículo precipitado por el acantiladoAntena 3 Noticias

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La semana pasada, una noticia daba la vuelta al mundo: una familia de cuatro miembros, entre ellos dos menores de edad, sobrevivía a un trágico accidentetras precipitarse su coche por un acantilado de 76 metros.

Los hechos ocurrían en California del Norte, en EEUU, y todos los ocupantes del vehículo lograban resultar ilesos, con heridas que no revisten de gravedad, pese al gran impacto del vehículo.

Según explicaban las autoridades locales, el coche podría haber dado varias vueltas antes de quedar encastrado en el acantilado, boca arriba, en una zona de difícil acceso y a tan solo metros del mar.

Esto obligó a los equipos de rescate a desplazarse hasta el lugar de los hechos en helicóptero y realizar un rescate que muchos ya han tildado de "milagroso", debido a su dificultad.

¿Fallo mecánico?

"Nunca antes había visto un accidente así y que todos sobrevivan. Ha sido un verdadero milagro", aseguraba un agente de la policía de carreteras del condado.

En un principio se pensaba que este fatídico accidente se debía a un fallo en el sistema del vehículo, un Tesla con conducción autónoma. Ahora, sin embargo, y tras las pruebas recogidas, la Policía ha descartado esta hipótesis y ha asegurado que se trata de "un acto intencional".

"No sé ha determinado en qué modo de conducción estaba el Tesla. Sin embargo, eso no parece ser un factor contribuyente en este incidente", aseguraba un agente a la CNN.

El conductor, que ahora se recupera de las heridas, ha sido ahora detenido acusado de intento de homicidio por presuntamente intentar acabar tanto con la vida de su mujer como con la de sus dos hijos, de tan solo 4 y 7 años.

El detenido es un hombre de 42 años, médico del Centro Médico Providence Holy Cross en Mission Hills, que podría ser trasladado a prisión una vez sea dado de alta.

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