Diez policías han muerto durante el asalto de guerrilleros talibán contra una comisaría del pueblo de Kulachi, en el noroeste de Pakistán, según han informado testigos presenciales y fuentes policiales.
Tres milicianos armados con granadas de mano y armas automáticas atacaron la comisaría de esta pequeña población situada cerca de la conflictiva región de Waziristán del Sur, en la zona fronteriza con Afganistán.
"Lanzaron granadas y dispararon indiscriminadamente durante su asalto a la comisaría", ha señalado el jefe local de la Policía, Imtiaz Shan, en declaraciones a Reuters. Shan ya asegurado que ya han sido enviados refuerzos policiales y militares para retomar la comisaría.
Un testigo presencial, Mohamad Raees, ha relatado cómo los tres atacantes llegaron en moto. "Uno llevaba un burqa y se lo quitó mientras comenzaban el ataque a la comisaría", dijo.