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LA SALIDA SE HARÁ EFECTIVA EN 2020
Estados Unidos podría tener otro presidente cuando se produzca la salida del país del Acuerdo de París
Cualquier país que haya ratificado el tratado solo podrá denunciarlo y solicitar su salida del mismo tres años después de su entrada en vigor, es decir, a partir del 4 de noviembre de 2019. Una vez hecha la petición, la salida surtiría efecto al cabo de un año, es decir, después de sus siguientes elecciones presidenciales.
La salida de Estados Unidos del Acuerdo de París anunciada por su presidente, Donald Trump, no se materializará hasta dentro de casi cuatro años, el 4 de noviembre de 2020, un día después de las próximas elecciones presidenciales, según consta en las normas que rigen el pacto climático.
El artículo 28 del Acuerdo de París dice que cualquier país que haya ratificado el tratado sólo podrá denunciarlo y solicitar su salida del mismo tres años después de su entrada en vigor, esto es a partir del 4 de noviembre de 2019.
Una vez hecha la petición, la salida "surtirá efecto al cabo de un año contado desde la fecha en que el depositario haya recibido la notificación correspondiente", por lo que EEUU no tendría más remedio que seguir perteneciendo al mismo hasta un día después de sus siguientes elecciones presidenciales.
Por tanto, la delegación estadounidense podrá seguir asistiendo y teniendo voz y voto en las negociaciones internacionales de cambio climático y en las cumbres de Naciones Unidas en esta materia hasta el día en que se haga efectiva la salida del acuerdo, en 2020. "Será extraño seguir viendo a los delegados de un país que ha decidido salirse del acuerdo", advierte un negociador, quien alerta del riesgo de que "los diplomáticos estadounidenses se conviertan en elementos de bloqueo durante los próximos cuatro años".
Por otra parte, Trump ha anunciado que abandona el Acuerdo de París pero no la Convención de Cambio Climático de Naciones Unidas, a la que se adhirió en 1992 con otro presidente del partido republicano, George Bush, y en la que se discuten todo tipo de asuntos paralelos relacionados con el cambio climático y la transición hacia un mundo bajo en carbono.
Al mismo tiempo, el presidente estadounidense ha hablado de "renegociar" el Acuerdo de París, una posibilidad no recogida en el texto legal, que solo habla de que los países deben ir revisando sus compromisos de reducción de emisiones al alza cada cinco años -no permite que sea a la baja- para evitar que la temperatura del planeta suba más allá de los peligrosos dos grados.
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