Varios cohetes disparados por "grupos armados terroristas" cayeron en barrios residenciales de Damasco, sin que por el momento se hayan registrado víctimas, informó la agencia de noticias oficial siria, Sana. La fuente destacó que "los terroristas" lanzaron los proyectiles desde las zonas de Yobar y Duma, dos de los principales bastiones de la oposición en la periferia damascena.
El disparo de los cohetes se produce en el primer día de un cese de las hostilidades, acordado por EEUU y Rusia, y que ha sido aceptado por el Gobierno sirio y la Comisión Suprema para las Negociaciones (CSN), la principal alianza opositora. No ha sido el único incidente desde la medianoche. Al menos dos personas han muerto al explotar un coche bomba en la entrada de una pequeña localidad de la provincia siria de Hama, según ha anunciado la televisión estatal. El coche bomba, cuya autoría apunta a Daesh, estalló contra un puesto de control de régimen a la entrada de la población de Salmiya, donde hubo dos efectivos gubernamentales muertos.
Más allá de ese coche bomba, Siria amaneció sin bombardeos en el primer día del alto el fuego entre el régimen y la oposición, y únicamente se registran combates en zonas donde están presentes el Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en el país, y Daesh. El alto en fuego, acordado por Rusia y EEUU, entró en vigor en el territorio sirio la pasada medianoche, después de que tanto el Gobierno de Damasco como la CSN dieran su visto bueno. Tanto Daesh como el Frente al Nusra han quedado excluidos del pacto para el cese de las hostilidades.
El Consejo de Seguridad de la ONU exigió el respeto del cese de hostilidades en Siria, mientras que la organización anunció una nueva ronda de negociaciones de paz entre el Gobierno y la oposición para el próximo 7 de marzo. Menos de una hora antes del inicio del alto el fuego, el máximo órgano de decisión de la Naciones Unidas lo respaldó con la aprobación por unanimidad de una resolución discutida hasta el último minuto por Estados Unidos y Rusia. El texto da la bienvenida a los compromisos de los bandos para detener la violencia y subraya la necesidad de que todos permitan el suministro inmediato de ayuda humanitaria a toda la población, incluida aquella que se encuentra en localidades sitiadas por combatientes.
Según los primeros informes recibidos por la ONU, al llegar la medianoche las ciudades de Damasco y de Daria "se calmaron de pronto", en observación de ese alto el fuego. Sin embargo, la organización también recibió información de un posible primer incidente, que está investigando, dijo el enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura. Anunció por videoconferencia al Consejo de Seguridad su intención de volver a reunir al régimen de Damasco y a representantes de la oposición. "Asumiendo que el cese de hostilidades se mantenga en general y que el acceso humanitario continúe, tengo intención de volver a convocar (...) las discusiones intrasirias el lunes 7 de marzo", dijo el diplomático.
La primera fase de negociaciones organizada por De Mistura en Ginebra, que volverá a acoger el diálogo, se suspendió a principios de este mes después de días de vanos intentos para iniciar el proceso. El mediador de la ONU advirtió de que con total seguridad habrá "incidentes" que alteren el alto el fuego y subrayó que lo "importante" será que éstos se puedan controlar rápido. "En todos los ceses de hostilidades que he visto en cualquier tipo de conflicto (...) hay una gran probabilidad de dificultades, necesidades de ajuste, tensiones e incidentes", subrayó.
Estados Unidos y Rusia se ocuparán, con ayuda de la ONU, de vigilar el cumplimiento del acuerdo y de la gestión de los problemas que puedan surgir, explicó De Mistura. Para ello, han puesto en funcionamiento centros de operaciones en Moscú, Washington, Latakia (Siria) y Amán, que recogerán la información sobre posibles violaciones. El compromiso aceptado por todas las partes es que el uso de la fuerza será el último recurso a la hora de responder a incumplimientos del cese de hostilidades, aseguró De Mistura.
Sobre las negociaciones de paz, el mediador dijo que la primera ronda durará tres semanas y a ella estarán invitados "los mismos representantes del Gobierno sirio y de la oposición" que participaron en el anterior intento. Además, la "agenda será exactamente la misma", con el objetivo principal de lograr una "solución política global a través de negociaciones sobre un proceso de transición política". Según destacó De Mistura, la actual situación es "la mejor oportunidad (...) que los sirios han tenido en cinco años de ver algo mejor".
Pese a liderar con sus acuerdos esos progresos, EE.UU. y Rusia se enzarzaron en una negociación de última hora sobre detalles de la resolución que finalmente aprobó el Consejo y que terminaron con la eliminación de varias referencias a la Comisión Suprema para las Negociaciones (CSN). Ese grupo, principal formación opositora y con sede en Riad, tiene la oposición de Rusia e Irán, y su desaparición del texto fue lamentada hoy por otros países como Francia y el Reino Unido.