Los duques de Sussex, obligados a abandonar su hogar británico por orden de Carlos III

Una de las casas más famosas de Reino Unido es la residencia de Frogmore Cottage, un espacio -que hasta este momento- los duques de Sussex consideraban su rincón seguro en el país. El rey Carlos III ha decidido ceder el espacio a su hermano el príncipe Andrés.

Clima de problemas en la familia real

Los conflictos de la familia Real Británica continúan aumentando y cada vez los miembros de la Casa Real se ven más expuestos. Después del documental de Harry y Meghan, del libro 'Spare' y de las decenas de entrevistas que han realizado los duques de Sussex- con fuertes acusaciones a su hermano- las represalias desde palacio no están tardando en llegar. Una de las respuestas reales ha sido 'desterrar' de Frogmore Cottage a Meghan y a Harry. Los duques de Sussex viven en California desde 2020, aunque su hogar británico siempre había sido la casa que forma parte del patrimonio público de la familia británica.

Una drástica decisión

La decisión del rey Carlos III no ha dejado indiferente a nadie e incluso, se ha comprobado el malestar tan evidente que hay en palacio. Según el medio británico 'Page Six' es una decisión que lleva meses sobre la mesa. Es una noticia que no parece haber cogido de sorpresa al príncipe y a Meghan, aunque los medios del país aseguran que "no ha sido bien recibida".

Asimismo, según "The Telegraph", el objetivo del rey Carlos III incluye recortar el presupuesto asignado a su hermano Andrés, que actualmente recibe 249.000 libras al año (280.000 euros) y vive en el Royal Lodge, una mansión con 30 habitaciones en Windsor Great Park. Como alternativa a su delicada situación, se ha propuesto que Andrés resida en Frogmore Cottage, una casa con diez habitaciones. Varias fuentes cercanas a la familia real han asegurado que el rey no tiene la intención de dejar a su hermano "sin hogar ni sin dinero".

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