La vacuna de Moderna contra el coronavirus podría estar lista para su uso generalizado a principios de noviembre, dijeron el lunes funcionarios estadounidenses. La empresa farmacéutica ha comenzado este lunes la tercera y última fase del ensayo de su vacuna experimental que se probará en 30.000 voluntarios para demostrar su seguridad y efectividad, el obstáculo final antes de la aprobación reglamentaria.
El gobierno de los Estados Unidos está tratando de acelerar el desarrollo, fabricación y distribución de vacunas, terapias y diagnósticos contra el coronavirus, financiando a diferentes farmacéuticas bajo un programa estatal llamado 'Operation Warp Speed', del que Moderna ha recibido casi mil millones de dólares por parte del gobierno. Más de 150 candidatos a la vacuna contra el coronavirus se encuentran en diversas etapas de desarrollo, de la cuales alrededor de 24 candidatas están realizando pruebas en humanos.
"Tener una vacuna segura y efectiva distribuida para finales de 2020 es una meta difícil, pero es la meta correcta para el pueblo estadounidense", dijo el director del Instituto Nacional de Salud (NIH), Francis Collins, en un comunicado que anuncia el inicio del gran ensayo de fase III de Moderna. Esta farmacéutica podría tener decenas de millones de dosis listas cuando la vacuna se considera segura y efectiva, según aseguró Collins.
Además de la vacuna de Moderna, existen otras dos vacunas que ya han entrado en la fase final de los ensayos clínicos previos a su validación: una de ellas es la de Oxford y la otra se está desarrollando en China.