Esta semana, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha instado al Congreso a celebrar cuanto antes una votación para reabrir el Gobierno y aumentar el límite de endeudamiento público porque tiene una "fuerte sospecha" de que ya hay "suficientes votos" para sacarlo adelante.
Estaba previsto que este 1 de octubre el Tesoro de Estados Unidos superara irremediablemente el límite de endeudamiento público, fijado en 16,7 billones de dólares, cayendo así en una nueva crisis de liquidez que podía llevar al cierre de la administración pública.
Para evitarlo era necesario que republicanos y demócratas se pusieran de acuerdo en el Congreso para ampliar el límite de endeudamiento público hasta los 988.000 millones de dólares, garantizando así el funcionamiento del Gobierno hasta la elaboración de los nuevos presupuestos generales.
La oposición republicana había elaborado un plan según el cual se comprometía a apoyar una ampliación del límite de endeudamiento público a cambio de nuevos recortes en el gasto público, centrados en la reforma sanitaria del Gobierno, a la que se conoce popularmente como 'Obamacare'.
Los estadounidenses quieren un tercer partido
El 60% de los estadounidenses considera necesario un tercer partido en el país dado el mal papel que los demócratas y los republicanos están realizando para representar los intereses de los ciudadanos, lo que supone un máximo histórico, según un sondeo de Gallup publicado este viernes.
La encuesta, realizada en el marco del cierre parcial del Gobierno motivado por la falta de acuerdo entre los dos grandes partidos para autorizar el presupuesto, también ha revelado que solo el 26% considera que el Partido Republicano y el Partido Demócrata les representan adecuadamente, el mínimo en los 10 años que hace que Gallup plantea esta cuestión.
Según el instituto demoscópico, estos datos son acordes con las opiniones más negativas expresadas por los estadounidenses hacia los dos grandes partidos desde que comenzó la paralización del Gobierno federal el pasado 1 de octubre y que han llevado a los republicanos a niveles mínimos.