Discursos grabados y encuentros virtuales protagonizan la Convención Demócrata más atípica por el coronavirus

Los demócratas elegirán a Joe Biden como candadito a la Casa Blanca en una Convención Nacional Demócrata condicionada por la crisis del coronavirus ya que no habrá público, será virtual y la mayoría de los discursos están grabados.

El objetivo: echar Trump

Por encima de todo, el objetivo de la convención será mandar un mensaje de unión para conseguir echar a Donald Trump de la Casa Blanca, al que le saca nueve puntos según las encuestas. Este año no habrá ni diluvio de globos, ni abrazos simbólicos, ni masas enardecidas como en 2016.

Esta madrugada arranca la convención demócrata con la presencia de Michelle Obama como plato fuerte y Bernie Sanders en la primera jornada. Se han recopilado alrededor de mil vídeos para la consagración de Joe Biden y Kamala Harris como candidatos porque todo hará de forma virtual.

Y es que el coironavirus lo ha cambiado todo: si hace cuatro años el tándem Clinton-Kaine se presentó de la mano, el dúo Biden-Harris lo ha hecho con mascarillas y distancia social. Ambos pronunciarán sus discursos de aceptación en Delaware, a 1300 kilómetros de Milwaukee, la ciudad elegida como sede simbólica. Los delegados votarán de forma virtual.