En la Cumbre de París de 2015, el presidente de los Estados Unidos Barack Obama participó con entusiasmo y promovió y suscribió todos los acuerdos. En la Cumbre de Nueva York de 2019, el presidente de los Estados Unidos Donald Trump estuvo presente durante sólo 10 minutos, no dijo nada y, por supuesto, su país no se ha adherido a compromiso alguno.
Por mucho que se esfuercen las potencias europeas, que la economía más poderosa del Planeta se haya bajado del barco de la lucha contra el cambio climático resta eficacia y credibilidad a cualquier compromiso
En Nueva York 77 países se han comprometido a trabajar para que el aumento de temperatura de la Tierra no supere el grado y medio a fin de siglo.Medidas concretas: no construir más centrales de carbón a partir de 2020 y reducir un 45% las emisiones de gases de efecto invernadero antes de 2030.
António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, va más lejos: "77 países se han comprometido a reducir a cero sus emisiones de carbono en 2050".Palabras igual de optimistas se escucharon en París hace cuatro años.
Entonces fueron muchos más, 195, los países que se comprometieron a reducir sus emisiones contaminantes...Una de las primeras decisiones de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos fue retirar a su país del Acuerdo.A cambio, Rusia está a punto de adherirse
