El Papa ha pedido la unidad de los cristianos, durante su primera alocución del viaje a Ginebra (Suiza) donde permanecerá tan solo 11 horas y ha señalado que "la vía contraria conduce a guerras y destrucciones". "Caminar juntos es elegir la lógica del servicio y avanzar en el perdón. El camino tiene una meta precisa: la unidad. La vía contraria conduce a guerras y destrucciones", ha subrayado Francisco.
El Pontífice ha rezado en el Centro Ecuménico del Consejo Ecuménico de las Iglesias (WCC) de Ginebra a donde acudió con motivo del 70º de su fundación y ha manifestado que "un mundo desgarrado por tantas divisiones que afectan a los más débiles, invoca unidad".
El Papa ha dejado claro que la división de los cristianos "contradice la voluntad de Cristo". Así, ante representantes de las diferentes Iglesias que conforman el WWC, el Pontífice ha resuelto que "a lo largo de la historia, las divisiones entre cristianos se han producido con frecuencia porque fundamentalmente se introducía una mentalidad mundana en la vida de las comunidades: primero se buscaban los propios intereses, solo después los de Jesucristo".
De este modo, ha indicado que "algunos intentos del pasado para poner fin a estas divisiones han fracasado estrepitosamente, porque estaban inspirados principalmente en una lógica mundana", mientras que el movimiento ecuménico ha puesto a los cristianos en camino porque "rechaza cualquier repliegue autorreferencial".
Sin embargo, ha lamentado que con demasiada frecuencia el camino ecuménico "se detiene ante las diferencias que persisten" y "con frecuencia se bloquea al empezar, desgastado por el pesimismo". "Las distancias no son excusas; se puede desde ahora caminar según el Espíritu: rezar, evangelizar, servir juntos, esto es posible y agradable a Dios. Caminar juntos, orar juntos, trabajar juntos: he aquí nuestro camino fundamental", ha dicho.
Tras destacar la importancia del 70º aniversario del Consejo Ecuménico de las Iglesias para fortalecer ese impulso ecuménico, el Papa ha avisado de que la división de los cristianos "es un escándalo para el mundo y perjudica a la causa santísima de predicar el Evangelio a toda criatura". "Caminar juntos para nosotros cristianos no es una estrategia para hacer valer más nuestro peso, sino que es un acto de obediencia al Señor y de amor al mundo", ha añadido.
El Consejo Mundial de Iglesias o Consejo Ecuménico de las Iglesias (World Council of Churches, WCC) fue fundado por 147 iglesias el 23 de agosto de 1948 y tiene su sede en Ginebra. A ella pertenecen unas 348 iglesias que engloban a 600 millones de cristianos en más de 120 países.