La enfermedad del World Trade Center que acumula 200 bomberos fallecidos

La exposición a la Zona Cero de los ataques del 11 de septiembre ha causado una serie de efectos en la salud entre los especialistas implicados en el rescate. Entre las consecuencias, se encuentran operaciones traumáticas y enfermedades de los sistemas respiratorio y digestivo, así como cánceres que incluyen linfoma, leucemia y mieloma. El polvo, el humo, y los productos químicos y tóxicos de los escombros afectaron también a policías, obreros de la construcción y otros trabajadores de emergencia.

Entre los diagnosticados de la denominada Enfermedad del World Trade Center, hay ya más de 90.000 personas. Sin embargo, los especialistas plantean la dificultad de determinar si estos cánceres son consecuencia directa de la exposición a elementos cancerígenos en los atentados o si se habría desarrollado igualmente.

El número de bomberos fallecidos por enfermedades desarrolladas a raíz de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en el World Trade Center ha alcanzado ya los 200. La última víctima ha sido Richard Driscoll, que se retiró en 2002 tras haber trabajado como bombero en Nueva York durante 32 años. El anterior bombero fallecido por las consecuencias de las condiciones en las que trabajaron durante los ataques terroristas sirvió en el Departamento del Fuego de Nueva York entre 1989 y 2007.

"Es incomprensible que tras la pérdida de 343 miembros el 11 de septiembre, ahora perdamos a otros 200 debido a la Enfermedad del World Trade Center", afirmó el Comisionario del Fuego Daniel Nigro. "Estos héroes dieron sus vidas heroicamente luchando para rescatar a otros. Nunca los olvidaremos", concluyó.