El enigmático asesinato a un 'carabiniere' por dos turistas estadounidenses que conmociona a Italia

Dos turista estadounidenses, de 19 y 20 años, apuñalaron el sábado pasado a un agente de la policía italiana después de robar la mochila, cargada de droga, a un camello.

Es entonces cuando se empieza a difundir la información a través de los medios de comunicación e Italia entera entra en un estado de shock al conocer los hechos. La ultraderecha del país comienza, entonces, a difundir información falsa sobre la nacionalidad de los acusados y el caso se instrumentaliza en el discurso político de los partidos italianos para poner en duda la seguridad ciudadana del país.

Pero hay algo que hace dudar. La versión de los Carabinieri, un cuerpo del estado que ya se ha visto envuelto en otros escándalos, cambia todo el rato, lo que hace que la gente empiece a dudar de la versión oficial del gobierno.

La primera versión oficial decía que los jóvenes, de 19 y 20 años, procedentes de Estados Unidos, robaron a un camello, que les ofrecía cocaína, en el barrio romano de Trastevere. Lo hicieron, según se cuenta, porque el camello les dio una pastilla de aspirina triturada en lugar de lo que ellos realmente buscaban.

El camello, asustado e inquieto por recuperar sus pertenencias, llamó a su propio teléfono -que se encontraba en el interior de la mochila- para pedirle a los asaltantes que le devolvieran sus cosas.

Ellos le cogen el teléfono, a cambio le piden que les llevase un gramo de "coca buena" hasta un barrio acomodado cercano al Vaticano, si lo que quiere es recuperar su mochila.

Lo más extraño viene ahora. El traficante llamó al 112 y le cuenta la historia a los Carabinieri, omitiendo la sustancia que contenía la bosa. Finalmente, a la cita acude el traficante con dos agentes y, sin saber la causa, uno de los jóvenes acaba asestando ocho navajazos a uno de los agentes: Mario Raga Cerciello, de 35 años.

Los dos chicos fueron detenidos en un hotel cercano al lugar del asesinato, donde también se escondía el arma con el que atacó al carabiniere.

En el interrogatorio, Edgar Finnegan Lee, 19 años, nacido en San Francisco, reconoce ser el autor material de la muerte de Mario Raga Cerciello. "Nunca había visto un militar sin uniforme. Lo confundí con un camello", confesó el joven. Lo sorprendente es que se negó a declarar ante el juez.

Este domingo, un periódico italiano ha publicado una foto del supuesto interrogatorio a Edgar en la comisaría, donde el joven lleva los ojos vendados y las manos atadas por detrás. Una imagen que pone en duda la credibilidad de todo el cuerpo de seguridad nacional.

Salvini, que continúa su campaña política, resta credibilidad a la imagen: “A quien se lamenta por eso -el presunto maltrato policial-, le recuerdo que la única víctima por quien llorar es un hombre, un hijo, un marido de 35 años, un carabiniere, un servidor de la patria muerto en servicio a manos de quien merece la cadena perpetua”.

Hay quienes, incluso, no se creen la versión que ofrece las fuentes oficiales del país. ¿Qué clase de camello llamaría a la policía para recuperar una mochila que contenía droga dentro? ¿Por qué no hubo patrullas de apoyo? ¿Por qué los carabinieri deciden intermediar en un caso de tal magnitud?