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LOS YIHADISTAS AVANZAN EN IRAK
Estado Islámico derrota al ejército y toma la estratégica ciudad de Ramadi
El autodenominado Estado Islámico se ha apuntado su principal victoria en el último año, con la toma de una ciudad clave en esta batalla: Ramadi, en Irak. Si los yihadistas no son desalojados, la organización terrorista estaría a las mismas puertas de Bagdad.
En su precipitada huida, el ejército iraquí se dejó atrás un grupo de 28 militares que corrían el peligro de ser ejecutados por los yihadistas, pero que pudieron ser finalmente rescatados en una compleja operación.
Rodeados por los combatientes del IS, el grupo de oficiales y soldados se había quedado atrapado en Ramadi. Su rescate fue grabado por las cámaras del ejercito iraquí: helicópteros de las fuerzas especiales inspeccionan la zona hasta dar con ellos.
El Ministerio de Defensa iraquí no ha querido dar ni un sólo detalle de la operación. Se ha limitado a decir que todos fueron rescatados con vida. Pero en un momento de la grabación se oyen intensos y repetidos disparos.
La maniobra fue arriesgada, pero el rescate fue un éxito. Las imágenes mostraban incluso cómo los soldados saludaban a su compañeros y hacían el signo de la victoria. Ramadi quedaba atrás, sus calles desiertas y la bandera negra ondeando, símbolo de la caída de la ciudad en manos del IS.
El domingo las fuerzas iraquíes tuvieron que retirarse ante el avance de los yihadistas. 500 personas han muerto y 25.000 han huido de una ciudad estratégica, a solo un centenar de kilómetros de Bagdad. Recuperar su control es crucial para el gobierno iraquí.
Unidades del ejército iraquí esperan a tan solo unos kilometros la ayuda de más 3.000 milicianos chiies para reconquistar la ciudad. Su apoyo despierta suspicacias y recelos.
Ramadi es una ciudad de mayoría suni. Sus habitantes temen que la llegada de las milicias chiies desate ajustes de cuentas entre las dos comunidades.
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